En diciembre de 2024 en el aeropuerto Aeropuerto Internacional de Muan un avión estrello se contra una abarrera dejando 179 muertos.
En diciembre de 2024, el vuelo 2216 de Jeju Air tenía que aterrizar en Corea del Sur como estaba previsto, pero durante su aterrizaje un ave fue atrapada en uno de los motores, lo que provocó una falla en el motor, pero el verdadero problema fue cuando, debido a que el tren de aterrizaje no se desplegó, aterrizó sin él y se estrelló contra una barrera sobre la que se encontraban antenas del aeropuerto. El detalle es que esa clase de estructuras debería ser de un material que, en casos como este, el avión pueda atravesarlo sin problemas.
En este caso, el avión se destruyó al colisionar, provocando la muerte de 175 pasajeros y 4 miembros de la tripulación; solo dos miembros sobrevivieron por estar sentados en la parte trasera.
Como en cada accidente aéreo, se realizó una investigación formal que recientemente desveló datos importantes sobre el accidente; esta revelación estaba programada para el sábado 19 de julio, pero se vio retrasada debido a protestas por parte de los familiares, quienes estaban al tanto de los datos revelados.
Estas protestas radican en que los investigadores planeaban culpar al piloto del incidente, mientras que ellos alegaban que pasaban otros datos por encima. Tales como la falla de motores que la aerolínea alegaba que estaban perfectos y que el accidente fue por culpa de un error humano. Aun cuando hay pruebas de que los pilotos reportaron el incidente con el ave y los motores.
Además de que en la investigación no se mencionaba la barrera de hormigón, que todo indica que eso fue lo que provocó el incidente, por lo que las familias exigen que se realice una mejor investigación y que sea mejor sustentada. Hasta el momento no hay más información.