La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) firmó un compromiso bilateral con la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA por sus siglas en inglés) para agilizar las obras de saneamiento ambiental en el río Tijuana, cuyo afluente resultó gravemente afectado por el derrame de aguas residuales del sistema de alcantarillado tijuanense.
El administrador de la EPA, Lee Zeldin, declaró que recorrió en helicóptero las inmediaciones de la Planta South Bay International en donde olió “lo que muchos residentes de la comunidad viven y tienen que soportar”, pero se dijo convencido de que México y Estados Unidos llegarían a una solución permanente a la contaminación de las playas y aguas que parten de Tijuana y desembocan en San Diego.
“Vi la degradación del valle del río Tijuana. Escuché hablar de las playas que se cerraron. Me reuní con los Navy Seals (marinos estadounidenses), cuyo entrenamiento se ha visto afectado. Fue una visita muy impactante para mí, pero mientras recorría estos diferentes lugares, supe con gran convicción que Estados Unidos y México pronto serían capaces de desarrollar y concretar esta solución 100 por ciento permanente gracias a esa primera reunión con la secretaria y el equipo de México”, declaró Zeldin.
¿Por qué está contaminado el río Tijuana?
En febrero de 2017, colapsó uno de los colectores principales del sistema del alcantarillado en Tijuana, lo que ocasionó que las aguas residuales de la ciudad llegaran al cauce del río. La Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA), organismo binacional encargado de los cuerpos de agua entre México y Estados Unidos, realizó estudios en distintos puntos a partir del derrame y determinó la importancia de implementar mayores recursos para rehabilitar el sistema de drenaje en Tijuana y para garantizar el tratamiento de los residuos sólidos de actividades industriales en la región.
El representante de la EPA calificó la contaminación del río Tijuana como una “crisis de drenaje” que es prioridad en la administración del presidente Donald Trump, afirmó.
“También estoy muy agradecido a muchas personas del lado estadounidense que están muy involucradas en este proceso, empezando por el presidente Trump. Cuando regresé de San Diego, estaba en el Despacho Oval y tenía una reunión con otros miembros del gabinete del presidente hablando de cuestiones energéticas que no tenían nada que ver con lo que estaba sucediendo en la zona de Tijuana-San Diego, y el presidente Trump, al principio, en medio y al final de la conversación, solo quería hablar de resolver este problema. Igual que yo había percibido esa intensidad en la secretaria Bárcena, en nombre de la presidenta y en nombre de México. Vi esa misma pasión y compromiso en el presidente, que acababa de ver en las noticias cómo se había visto afectado el entrenamiento de los Navy SEAL en Coronado y no había forma de que fuera a descansar o aceptar que nos quedáramos cortos”, argumentó Zeldin.
La titular de la Semarnat, Alicia Bárcena, afirmó que la firma de este convenio de colaboración entre México y Estados Unidos agilizará la construcción de las obras de saneamiento que están en curso en la zona fronteriza entre ambas naciones y dará una solución final al problema de aguas residuales que viajan desde Tijuana al territorio estadounidense.
“Lo que vamos a firmar el día de hoy corresponde a lo que va a hacer México y lo que va a hacer Estados Unidos entre este año, el 2026 y el 2027 para poder finalizar todo lo que nos hemos comprometido: la rehabilitación del colector Insurgentes, la rehabilitación del matadero y los laureles del interceptor Poniente, del interceptor Oriente, del colector Carranza, del suministro de energía. La construcción durante el 2027 para mejorar las plantas de tratamiento de Arturo Herrera y La Morita, la fase dos del colector internacional de rehabilitación de la tubería del impulsor antiguo cárcamo de bombeo, impulsión de cañón de Santa Sainz a la planta de Arturo Herrera”, detalló la secretaria Alicia Bárcena.