Trump contra la ONU: migración, cambio climático y Palestina en el centro del discurso
Durante su intervención en la 80.ª Asamblea General de la ONU, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, adoptó un tono abiertamente crítico hacia la organización internacional. Cuestionó su eficacia en la resolución de conflictos globales y afirmó que la ONU no ha cumplido con su misión de promover la paz y la seguridad. “¿Cuál es el propósito de las Naciones Unidas?”, preguntó al inicio de su discurso, lamentando que haya tenido que intervenir personalmente en conflictos que, según él, deberían haber sido gestionados por el organismo.
Trump aseguró que bajo su liderazgo, Estados Unidos ha contribuido a resolver siete conflictos internacionales, entre ellos los enfrentamientos entre Camboya y Tailandia, Kosovo y Serbia, y Armenia y Azerbaiyán. Reprochó la ausencia de la ONU en estos procesos y sugirió que, por sus esfuerzos diplomáticos, debería recibir el Premio Nobel de la Paz. También ironizó sobre la infraestructura de la sede de la ONU en Nueva York, mencionando una escalera mecánica que se detuvo a mitad de camino y un teleprompter que no funcionó, como sus únicas experiencias “positivas” con el organismo.
En materia migratoria, Trump acusó a la ONU de fomentar la inmigración ilegal, especialmente en Europa, y afirmó que los países del continente están siendo “destruidos” por no tomar medidas firmes. Criticó lo que llamó una invasión masiva de migrantes ilegales y señaló que, por corrección política, los gobiernos europeos no están actuando. En ese contexto, defendió las políticas de su administración para reducir los cruces ilegales en la frontera con México y acusó al organismo internacional de financiar estas oleadas migratorias.
El mandatario insistió en que la ONU debería detener las invasiones, no promoverlas, y reafirmó que Estados Unidos pertenece al pueblo estadounidense. Llamó a otros países a proteger su soberanía y a rechazar la entrada masiva de extranjeros que, según él, provocan delincuencia y debilitan los sistemas de seguridad social. “Rechazamos la idea de que se pisoteen nuestras fronteras”, declaró, en un llamado a endurecer las políticas migratorias a nivel global.
Trump también abordó el tema del cambio climático, calificándolo como “la mayor estafa” jamás perpetrada. Desestimó las energías renovables, llamándolas “una broma”, y afirmó que las predicciones sobre el calentamiento global han sido erróneas. Celebró la retirada de Estados Unidos del Acuerdo de París y defendió el uso del “carbón limpio y hermoso”, mientras acusaba a países asiáticos de contaminar los océanos con basura que termina en las costas estadounidenses.
Finalmente, el presidente se refirió al conflicto israelí-palestino y criticó a los países que han reconocido unilateralmente un Estado palestino. Afirmó que esa decisión equivale a premiar al grupo islamista Hamás y pidió que el mensaje internacional se centre en exigir la liberación de los rehenes. Según cifras israelíes, aún hay 48 personas secuestradas, aunque solo 20 seguirían con vida. Trump instó a los aliados de Estados Unidos a replantear su postura y apoyar a Israel en este conflicto