México

A un año del colapso de la Línea 12 del metro ¿qué pasó con los culpables?

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Por Teté Velderrain 30 Junio 2022

Se dice que el lugar, aún remueve el dolor a las familias de las 26 personas fallecidas, y a más de 100 heridas, la mayoría de ellos pasa a diario por el lugar.

Ciudad de México.- El accidente de la línea 12 del metro de la Ciudad de México, ocurrido el lunes 3 de mayo de 2021, alrededor de las 22 horas, tuvo consecuencia un estimado de 26 fallecidos y alrededor de 96 heridos.

 

Este fue el segundo accidente más mortífero de este sistema de transporte, solo superado por la Colisión de trenes en el Metro de la Ciudad de México de 1975 y es el primero y más grave de su tipo (por derrumbe de estructuras).


Posterior al suceso, usuarios de redes sociales exhibieron denuncias ciudadanas, en donde afirmaban que desde el año 2017 en el que hubo un fuerte sismo en la Ciudad de México, la línea 12 del metro había quedado notoriamente desnivelada.


También, salieron a la luz quejas anteriores en donde ciudadanos e internautas habían denunciado el desnivel de la estructura, más el gobierno había hecho caso omiso.

 

Además, denunciaron los mismos internautas de que mediante la plataforma “Google maps” se veía “borroso” en lugar en donde se encontraba el desnivel entre las estaciones Olivos y Tezonco de la Línea 12 del Metro de la Ciudad de México, lugar en donde ocurrió el incidente.

 

El presidente Andrés Manuel López Obrador, ante este suceso, decretó tres días de luto nacional, y dijo durante su conferencia de prensa mañanera, que se daría a conocer toda la verdad sobre el accidente.

 

El abogado Gabriel Regino acusó que el Gobierno de la Ciudad de México presuntamente estaría protegiendo a Florencia Serranía, ex directora del Metro de la Ciudad de México.

 

“Florencia Serranía, se mantiene en la impunidad, en ningún momento ha sido citada a declarar ante la fiscalía; no se le ha tocado ni con el pétalo de una rosa”, - dijo el abogado Gabriel Regino.

 

Se dice que el lugar, aún remueve el dolor a las familias de las 26 personas fallecidas, y a más de 100 heridas, la mayoría de ellos pasa a diario por el lugar.

 

“Al pasar por ahí revivo el momento, me vienen todos los malos recuerdos, siento coraje y a la vez tristeza por todo lo que hemos pasado”, dijo Janneth Arzate, quien viajaba en el tren que se desplomó aquel día.

 

“Yo ya no tendría la confianza de abordar el Metro aunque lo reparen, hasta ahorita me da mucho miedo, mucho pánico, es más no tolero siquiera ver la estructura, tengo que pasar agachándome o viendo para otro lado”. – dijo Nancy Ramírez, sobreviviente del accidente.

 

“Con las vidas no se juega, una vida no puede valer 650 mil pesos, que quedes lisiado para toda tu vida ni puede valer 150 mil pesos, no vamos a permitir eso”, dijo Teófilo Benítez, abogado de 12 de las víctimas.

 

Nancy “N” a quien diagnosticaron con lesiones de intensidad media, pese a que aún no supera la doble fractura de cadera y el esguince cervical, sigue bajo tratamiento psicológico y psiquiátrico por estrés postraumático.

 

“No he firmado un acuerdo reparatorio porque no me han reclasificado el delito. Sigo estando como lesiones de intensidad media, cuando no es así. Los médicos han diagnosticado que no puedo cargar más de cinco kilos, no puedo subir escaleras, no puedo agacharme”.

 

Dice que hay gente que piensa que las víctimas quieren lucrar y sacar dinero con lo ocurrido, más no saben el proceso que están viviendo, pues afirman que sus vidas cambiaron, no pueden trabajar igual y sus familias tienen que dejar lo que están haciendo para estar con ellos.

 

También afirman que por las secuelas, les ofrecen 2 mil pesos mensuales, pero hay dos puntos: 1.- ¿Quién vive con 2 mil pesos mensuales?, además, sólo se los ofrecen pero no se los han dado.

 

“Dependo del medicamento y me han tenido que incrementar la dosis; incluso me he ayudado con terapia psicológicas y me dicen que el tratamiento va para largo”.

 

“Tardan mucho en darme el medicamento; me dicen que yo lo compre y luego se me hará una bonificación, pero tardan mucho” – concluyó Nancy Ramírez.