Diputados de Morena buscan a los equipos de Romo y Urzúa preocupados por baja salarial
Por La Gaceta.me 18 Julio 2018
Difícil situación patrimonial tras la campaña. Quieren que los sueldos sigan igual un año más.
Comienza a extenderse las preocupación entre algunos diputados federales electos por Morena. Sucede que existen decenas de casos de futuros legisladores que pidieron prestamos bancarios a través de amigos, hipotecaron propiedades y vendieron vehículos para cosearse sus campañas ya ahora la reducción de gastos en San Lázaro que proyecta Andrés Manuel López Obrador los ubica en una situación patrimonial muy delicada.
Esta semana se realizó una reunión a puertas cerradas entre algunos con la misma situación que ahora buscan pedirle ya sea al equipo de Alfonso Romo o bien al de Carlos Urzúa (Hacienda) que se revise el megarecorte previsto para San Lázaro y que por lo menos los salarios se mantengan como están un año más.
Una campaña para una diputación federal puede oscilar, según el distrito, entre los 2 y los 6 millones de pesos. Hubo casi una decena de estados donde los candidatos casi no recibieron dinero para sus campañas.
"Sin recurso del Partido, eludiendo la financiación del crimen organizado y si uno no tiene amigos empresarios a muchos no les quedó de otra que empeñar su patrimonio o coontraer deudas con familair y amigos que ahora no se pueden pagar", expresa a LPO uno de los afectados.
En el tramo final de la campaña cuando la ventaja de Morena seguía solida, por poner un ejemplo, aspirantes a diputados del PRI, el PRD, MC o independientes ya se sabían perdedores entonces resguardaban su patrimonio. En cambio los de Morena, en múltiples casos, vieron la chance e hicieron el esfuerzo final.
Lentamente comienzan a asomar de este modo los factores de la realidad que a veces escapan a los proyectos o a los programas escritos en Word. Las evidencias aparecen: trasladar secretarias a otros estados con empleados sindicalizados sería un dolor de cabeza interminable y un gasto estratosférico, reducir fuertemente los salarios del gabinete y los funcionarios generaría que los empleados terminaran ganando más que los jefes y ahora el drama económico de los legisladores.
Fuente: La Política Online