Consideremos a la depresión como una enfermedad clínica severa, muchos lo confunden con la circunstancia de sentirse triste o bajoneado por unos días, sin embargo, es un trastorno en el cerebro.
La depresión es un asesino silencioso cuando no ha sido diagnosticado correctamente y muchas veces la podemos confundir con fatiga y hartazgo. Hay que tener mucho cuidado ya que, si no es controlada a tiempo, nos puede llevar a desordenes más graves tanto psicológicos como físicos.
Consideremos a la depresión como una enfermedad clínica severa, muchos lo confunden con la circunstancia de sentirse triste o bajoneado por unos días, sin embargo, es un trastorno en el cerebro. Sí, la tristeza es una emoción que nos acompaña día con día, es normal y basta con recordar algún suceso o hacer consciente alguna situación actual para sentirla. Aún así, hay días en los que todo es perfecto y no nos encontramos ni felices ni a gusto, es decir, tenemos todo y no sabemos el por qué sentimos ese tremendo vacío que nos consume por dentro. Esto sí es un síntoma de poder estar sufriendo de este padecimiento y más aún si se extiende por un largo periodo de tiempo.
Existen diversas causas para poder tenerla que van desde la genética, el ambiente, problemas químicos del cuerpo entre otros y lo más alarmante es que puede comenzar a cualquier edad.
Aunque a las mujeres es más probable que esta condición las ataque, es momento de revisar qué está sucediendo cuando:
Sin motivo alguno, deseas mantener distancia con tus familiares y amigos; así mismo, no deseas involucrarte en actividades que involucren convivencia social.
El insomnio se está volviendo un gran enemigo y de pilón, estás comenzando a sufrir ataques de ansiedad. Tus pensamientos se enfocan en lo negativo de todo y empiezas a sufrir episodios de pánico.
Dejas de lado aquellas actividades como el deporte que te regalaban placer y prefieres comenzar a hundirte en la hueva y en los vicios. OJO, esto puede generar aún mayor dependencia si no se identifica a tiempo.
La pérdida de placer en la vida diaria y el vivir con un constante vacío, temor y angustia puede estar reflejándose en una depresión clínica y que quizá estás confundiendo con una “rachita”. Una pérdida significativa puede ser el motivo para que esto se desencadene así que no lo dejes de lado.
Todos necesitamos a un psicólogo, eso es claro; si no cuentas con un tratamiento psicológico y sientes que puedes tener un problema de depresión, acude y permítele a los profesionales determinar qué necesitas o que tratamiento puede ayudarte a darle sabor a tus días.
Complementando esto, es importante que aprendas a relajarte, tomar meditación (hasta en tu casa y en Youtube lo puedes hacer), no abandonar el ejercicio, no guardar lo que sientes ante todo el mundo, si pasaste por un momento muy duro soltarlo y entender que todo lo que nos sucede es parte de ese proceso tan perfecto -aunque no lo parezca- llamado vida. Regálate una oportunidad, busca ayuda y no permitas que los vicios y las enfermedades opaquen tu sonrisa ¡ÁNIMO!