Godzilla Minus One – Review: Un japón devastado por la posguerra es llevado de cero a menos uno
Por Diego Beytia 04 Enero 2024
¿Ya la viste? Godzilla Minus One: ¿Vale la pena verla? ¡Te contamos!
¿Cuándo fue la última vez que lloraste viendo una película de Godzilla? Si viste recientemente la nueva película del Kaiju favorito de todos, «Godzilla Minus One» probablemente fue hace no mucho. La película japonesa, dirigida por Takashi Yamazaki y estrenada en tierras mexicanas el pasado 28 de diciembre, es, sin temor a equivocarme, una de las sorpresas del año para la mayoría de los espectadores.
Con prácticamente el tercio del presupuesto de un blockbuster de Hollywood, los japoneses nos entregan una película que no solo ofrece buenas escenas de destrucción al estilo clásico del lagarto bípedo, sino que también nos da una historia sólida de la mano de sus contrapartes humanas.
El film nos sitúa en el año 1945, justo después de que las bombas atómicas cayeran sobre Hiroshima y Nagasaki, dejando al país en ruinas y al borde de la rendición. En medio de este escenario desolador, surge una nueva amenaza: un gigantesco reptil mutado por la radiación, que comienza a arrasar las ciudades que quedan en pie. El gobierno japonés, debilitado y presionado por las potencias aliadas, no tiene recursos ni voluntad para enfrentar al monstruo, y deja a la población a su suerte. Sin embargo, un grupo de civiles, liderados por un joven científico que participó en la guerra, decide tomar cartas en el asunto y buscar una forma de detener a Godzilla. Lo que empieza como una misión suicida, se convierte en una odisea de redención para el protagonista que nos muestra el valor de la resistencia, la solidaridad y la identidad nacional característica de los habitantes del país del sol naciente.
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Una de las cosas que Godzilla Minus One hace bien, -y hace muchas cosas bien- es reformular la dicotomía entre la trama humana y la presencia del monstruo protagonista. Godzilla ha sido un símbolo de temor reflejo de ansiedades sociales como la bomba atómica y la radiación nuclear hasta la burocracia mediocre, pero minus one se nos presenta como una alegoría a la devastación de la postguerra.
Por supuesto, este recordatorio se integra en el propósito de la película como una epopeya antibélica y un melodrama social. El ejército japonés no hace nada en esta película. Apenas están presentes para ayudar, y su principal excusa es no agravar las tensiones entre Rusia y Estados Unidos.
Lo conmovedor de esta película es cómo el elenco de personajes desarrolla un sentido de liderazgo y orgullo nacional que está distanciado de los fracasos de su propio gobierno. No es la primera película del personaje que se centra en el desarrollo de las tramas y conflictos humanos relacionados con el ataque de la criatura, pero sí es una que lo intenta y lo hace bien (Más tomando en cuenta sus contrapartes recientes de occidente). La “rivalidad” entre kaiju y el protagonista se maneja de manera consistente y creíble, y aunque tenemos algunos giros en la trama algo predecibles, -principalmente al final- Hay un buen peso emocional también, y Godzilla le otorga la solidez y escala necesarias para funcionar adecuadamente como una producción que refleja las victorias y fracasos humanos. Es una película que debes ver si eres fanático del personaje y su universo, especialmente de las películas clásicas, e incluso si solo quieres algo para ver en el cine un fin de semana o una tarde libre; Estoy seguro de que no va a dejarte indiferente.