Surgen nuevas versiones sobre lo que habría provocado el llamado a no hacer caso al subsecretario Hugo López-Gatell
El zipizape verbal entre TV Azteca y Hugo López-Gatell que
se generó cuando Javier Alatorre, conductor del noticiero estelar de la
televisora, pidiera no hacer caso al subsecretario de Salud, voz oficial del
gobierno de México en esta pandemia, generó varias hipótesis sobre el motivo de
la discordia.
Una de ellas es que la bronca habría surgido porque la
Secretaría de Salud y otras dependencias federales, por la emergencia
sanitaria, habían ordenado el cierre de empresas de Grupo Salinas, en este caso
Elektra y Banco Azteca, en algunos puntos del país.
Otra versión que se ventiló que el Servicio de
Administración Tributaria, el SAT, había retomado con más fuerza una
persecución contra Ricardo Salinas Pliego, propietario de Grupo Salinas, al que
también pertenece TV Azteca, por un adeudo de miles de millones de pesos en
impuestos no reportados al fisco.
Pero hay una más reciente, y apunta a que se trató de un
berrinche del dueño de Azteca, Ricardo Salinas, porque la Secretaría de Salud,
o más claro, Hugo López Gatell, bloqueó los permisos para el uso de más de 2
millones de pruebas rápidas para detectar el Covid que se habían mandado traer
desde China, porque no eran confiables.
Este última, según ha trascendido, es todavía un tema
pendiente, porque aún no está resuelto, sin embargo, considerando que se trató
de una estrategia para presionar al gobierno, faltaría ver si surge efecto la
presión y se autorizan las pruebas rápidas traídas desde el país donde nació el
nuevo Coronavirus.
Por lo pronto, la Secretaría de Gobernación envió un
apercibimiento público a la televisora por el llamado a desobedecer las medidas
establecidas por el Consejo de Salubridad en el país, debido a la pandemia.
Mientras que el presidente López Obrador recomendó a
Gobernación no aplicar ninguna sanción a la empresa de Ricardo Salinas Pliego
por ese exabrupto.