Un tamal gigante: El castigo para los ABUSADORES en la época prehispánica
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Por Griselda Angulo 28 Enero 2021
Por abusar de mujeres vírgenes, Huastecos crearon peculiar castigo que se convertiría en tradición
El abuso contra las mujeres fue castigado desde tiempos prehispánicos. En la época Huasteca ¡Se comían al agresor! Así nació uno de los platillos más emblemáticos de la zona: el zacahuil
El también llamado tamal gigante, una joya gastronómica mexicana, esconde una historia de “justicia” que los Huastecos “tomaron con sus propias manos”
Según relatos transmitidos por cronistas, en 1468, un hombre de edad avanzada fue enviado por Moctezuma a recaudar el tributo entre los pueblos que permanecían bajo su poder, sin embargo, este hombre aprovechó su poder para agredir a jovenes virgenes
Luego de que los mexicas fueron derrotados por los tarascos, cuando el pueblo Huasteco se enteró, aprovechó para tomar como prisionero al mayordomo de Tenochtitlan.
Los Huastecos estaban furiosos, pues conocían de los agravios que el hombre había cometido contra sus mujeres; de modo que decidieron matarlo y desollarlo para usar su carne en un gigantesco tamal ceremonial, que luego comieron las víctimas.
Envolvieron el cuerpo con masa enchilada y molida en metate, lo cubrieron con hojas de la planta de plátano y papatla, para finalmente colocarlo dentro de un hoyo enorme en la tierra que llenaron con rocas y brasas
Una vez cocido el colosal tamal, repartieron porciones entre las mujeres agredidas, quienes coreaban “tlanque cualantli”, es decir, “se acabó el problema”.
Más tarde retomaría la práctica como tradición, cambiando el cuerpo del agresor por prisioneros de guerra. Esta costumbre no tendría fin, sino hasta la llegada de los frailes españoles. El sacrificio se repetiría con sus prisioneros de guerra, convirtiéndose en una tradición de los huastecos hasta la llegada de los frailes españoles que, horrorizados, cambiaron la carne humana en la receta por animales.
Este tamal se sigue cocinando hasta la actualidad para fechas especiales como bodas y quince años, pero ahora con carne de res, cerdo, pollo e incluso guajolote
Con información de Zócalo.com
