Modificar Ley Orgánica de la UAS ¿Para qué? Desde hace tiempo atrás hemos sido testigos de que un pequeño grupúsculo de gentes, pretenden modificar la Ley Orgánica de la UAS en lo que respecta a la elección del Rector básicamente, para que ya no sea el Consejo Universitario quienes digan quién será el Rector. Nos queda claro que todo ello implicaría volver a las viejas prácticas de antes, en donde se manipulaban a los alumnos y a los maestros mediante los grupos políticos al interior de la Universidad para que votaran por tal o por cual candidato de su preferencia. Pero más que todo, le hacían muchísimo daño a la institución, a grado tal que se llegaba a rechazar a la gente que egresada de la UAS (le hacían el fuchi pues por grillos). Pero también, debemos de reconocer que hoy en día la Universidad es otra en su tipo, pésele a quien le pese y duélale a quien le duela, la UAS es una institución reconocida de entre las 5 primeras universidades a nivel nacional con los más altos estándares de calidad académica. Hoy la UAS tiene mejor infraestructura, con mejores maestros, y permanece en constante evolución. Todo parece indicar que este tema de la Ley Orgánica de la UAS, más que ser académico, se mira politizado, y para muestras un pequeño botón mis queridos lectores. Todos estamos enterados que quien está detrás de la Coordinadora de la Bancada de MoReNa en el Congreso del Estado de Sinaloa: Graciela Domínguez Nava, es nada más y nada menos que el Ex Rector de la UAS y ahora Senador: Rubén Rocha Moya, este mismo sujeto que nunca se atrevió a hacer nada por la UAS, hasta que le tocó el turno al Ex Rector de la UAS: Héctor Melesio Cuén Ojeda, quien sí, tuvo los arrestos necesarios para entrarle de lleno a una real transformación que le requeté urgía a la Universidad. Entonces, que es lo que buscan: Rocha Moya, Domínguez Nava, y otros tantos más que les siguen el rollo, y que a su vez dicen que: Cuén Ojeda, es el dueño de la Universidad, pero sin mostrar pruebas contundentes. Sabemos con claridad que la UAS se encuentra auditada al menos 6 veces por año, pero eso sí, los infundios y las calumnias sin sustento alguno, no paran en contra de: Cuén Ojeda (aparte: Cuén, no trabaja en la UAS, está de permiso sin goce de sueldo). Inclusive, hemos sido testigos oculares que en las redes sociales publican que: Cuén Ojeda, tiene a cientos de familiares metidos en la universidad -vaya que el árbol genealógico de la familia: Cuén, debe de estar bastante extenso para tener a todo ese titipuchal de gente- ¿Dónde están las pruebas? Porque el que habla debe probarlo ¿No lo cree usted querido lector? Pero, en fin, nos queda claro que esto es una guerra mediática y una guerra política. Evidentemente que: Rubén Rocha Moya, quiere ser candidato a la gubernatura de Sinaloa, y que mejor que querer anular a: Cuén Ojeda, con el dizque despojo de la UAS, y para ello: Rocha Moya, echa mano de su titiritera: Graciela Domínguez Nava, la flamante: Coordinadora de la bancada de MoReNa de los Diputados Locales. Hemos sido testigos también, de los muchos pronunciamientos de miles de alumnos y de maestros universitarios que se han manifestado en todo el Estado de Sinaloa, donde han salido a defender la autonomía de la universidad, inclusive han estado postrados en las afueras del Congreso del Estado de Sinaloa, diciéndoles a los Diputados Locales que no quieren absolutamente ninguna modificación a la Ley Orgánica de la UAS. El aviso es muy claro, no despierten a la fiera universitaria, porque las cosas pueden pasar a ser de lustres consecuencias, porque tanto los alumnos como los maestros -por medio de las benditas redes sociales, dijera: AMLO- saben cómo está el teje y maneje de la situación que poco tiene que ver con lo académico, pero sí muchísimo con lo político. Con auto-secuestros, demencia, y otras sartas de mentiras más, quieren obstaculizar y esconder la mano que mece la cuna del Ex Rector: Rubén Rocha Moya. Aunque habría que decirlo también, muchos detractores del maestro: Héctor Melesio Cuén Ojeda, dicen por todos lados que tiene secuestrada a la UAS, metido políticamente con el PAS, pero si algo nos queda claro, es que en la UAS existen diversidad de fuerzas políticas e ideológicas también, sino dígame usted querido lector, tantos votos tuvo: Rocha Moya, como: Cuén Ojeda, por ambos votaron muchos universitarios y eso lo tenemos muy claro, vaya que existe libertad en la UAS, nadie está maniatado, porque de lo contrario si todos los alumnos y maestros, hubieran votado por: Cuén Ojeda, hubiera sido: Senador, y después: Gobernador, tan lógico y así de fácil como usted lo está leyendo querido lector. Simple y llanamente veamos la historia del antes y el después, ¿Cómo estaba la universidad antes de Cuén? con aulas paupérrimas hechas un desastre con maestros en huelga y evidentemente con alumnos sin clases hasta por semanas, vendiendo calificaciones o chantajeando a los alumnos para que votaran por tal o cual candidato a su favor. Pero de Cuén para acá, se mira el cambio con mejor infraestructura en donde los maestros están puntualmente impartiendo clases para los alumnos, esto por citar un ejemplo de manera contundente. Pero ciertamente volviendo al pasado nefasto en que se vivía en la UAS, que fue lo que hizo: Héctor Melesio Cuén Ojeda, tuvo el gran valor de ponerle orden a la universidad, poniendo cada cosa y cada gente en su lugar, dejando de lado a los aviadores que realmente si tenían secuestrada a la universidad, ah, pero: Cuén Ojeda, tuvo la osadía de pisarle los callos a los vividores de la UAS -esos que cobraban por no trabajar, que se mantenían en huelga para pedir más dinero- maestros de base y de tiempo completo y hasta del sindicato académico y administrativo, que solo sangraban a la universidad con sus movimientos maquiavélicos, eso es lo que quieren ahora los que se dicen representantes de la sociedad y que se escudan con la bandera de la 4ta. Transformación y que en nada le ayudan al Presidente: López Obrador. Mejor no me ayudes compadre. Entonces: ¿Porque pretender modificar la Ley Orgánica de la UAS? ¿Quiénes se beneficiarían? Indudablemente que quienes saldrían perdiendo sería la propia comunidad universitaria y hasta la sociedad sinaloense. Volver al pasado en la UAS, sería desastroso…