Opinion

Cae funcionario del “Colchongate”

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Por Oswaldo Villaseñor 19 Octubre 2018

Sin Quitarle ni Ponerle

Todos los caminos conducen hacía el o los proveedores de los colchones en mal estado que fueron repartidos a familias damnificadas por las inundaciones, como la ruta más segura para aclarar el indignante caso del “colchongate”.


Eso sí, la probable responsabilidad del funcionario público que hizo la compra, también es otra línea que necesariamente tiene que agotarse y seguirse.


Después del anuncio del gobernador Quirino Ordaz de que se pediría a la Fiscalía General del Estado iniciar una investigación a fondo para determinar y deslindar responsabilidades, hoy ya se tiene al primer implicado detenido.


Se trata efectivamente del director administrativo de la Secretaría de Desarrollo Social, Carlos Castro Olivas a quien ayer la Policía Ministerial lo aprehendió cuando regresaba supuestamente de Guadalajara y fue puesto a disposición del juez.


A partir de hoy, será precisamente el juez que lleve su caso quien determinará el grado de responsabilidad que pueda tener.


Así será precisamente el funcionario público implicado quien en su defensa tendrá que aportar toda la información que pruebe su inocencia si es que fue “chamaqueado” por el proveedor quien ese sí, no tiene ninguna justificación por haber entregado los colchones en mal estado.


Es por eso que decimos. Todos los caminos necesariamente conducirán al proveedor, aunque la responsabilidad del funcionario no podrá eludirse definitivamente.


1.-Ayer Baltazar Castro, papá del funcionario ahora ya indiciado y ante el juez, salió a ofrecer una conferencia de prensa para entrar a la defensa de su hijo de quien dijo obró de buena fe y fue timado por un proveedor de quien reveló incluso su nombre y dirección.


2.-El empresario del ramo del acero, Baltazar Castro responsabilizó de toda la culpa al proveedor de quien dijo si obró de mala fe, no su hijo quien hizo la compra, a grado tal de que ya se había interpuesto una demanda penal en un juzgado de Guadalajara en contra del empresario colchonero.


3.-A decir de Baltazar Castro en la conferencia de prensa ofrecida, su hijo estaría el día de hoy en Culiacán para responder a todas las inquietudes y dudas que se tengan sobre el caso. Lo cierto es que ahora tendrá que hacerlo ante un juez al ser aprehendido ayer.


4.-Desde luego la hipótesis que lleva a culpar al proveedor, se fortaleció ayer cuando el exdiputado panista Juan Pablo Yamuni reconoció que él también compró 30 colchones a título personal y con recursos propios para entregarlo en apoyo a familias afectadas, pero resultó que también fue defraudado y timado al ya tener el reporte de 9 casos de colchones que resultaron estar en malas condiciones.


5.-Desde luego insistimos, la responsabilidad del funcionario la tendrá que declarar un juez y será el mismo quien determine también la situación legal del proveedor.


Por lo pronto, el funcionario ya está a disposición del juez y el Gobierno del Estado ha actuado con mano firme para no permitir casos de corrupción y menos abusos en contra de las familias que resultaron afectadas por las pasadas inundaciones.


La FGE ya hizo su chamba, ahora habrá que ver que dice el juez.


Así sin quitarle ni ponerle


Habrá que estar pendientes.


PASO A PASITO.-El choque de trenes entre Gerardo Vargas y el gobernador Quirino Ordaz sigue. Ayer mismo circuló por redes sociales un segundo video editado donde se retoma y se explica parte de lo dicho en el primero.


Hasta ahorita se comparta o no, se entienda o no lo hecho por Gerardo Vargas, se ve con asombro e interés. Ahora falta por ver que hará el gobierno de Quirino ante el reto abierto ya lanzado.


Eso es lo que está por verse.


OTRO PASITO.-El Secretario de Pesca Estatal, Sergio Torres viajó a la ciudad de México para ver si aún es posible reactivar el programa de entrega de motores marinos en apoyo a los pescadores sinaloenses.


Sergio Torres se mostró confiado en conseguir motores marinos porque esa fue la tarea dada por el gobernador Quirino Ordaz de no regresar con las manos vacías.


Ya veremos dijo el ciego.