Opinion

Crear ingobernabilidad…

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Por Benjamín Bojórquez Olea 09 Junio 2020

SOBRE EL CAMINO

Todos somos todos… Me explico: Se han puesto a pensar en que vivimos en una sociedad que de forma voluntaria e involuntaria obsequiamos la verdad absoluta o direcciones opuestas a los intereses personales, a la cual exigimos de forma grosera las interrogantes o especulaciones a dicho gobierno que encabeza el ciudadano gobernador sinaloense. Es pertinente el sentido de las letras. Mucho de lo que pasa ahora, situación inédita, no es sino señal de lo que construimos a lo largo de nuestra historia. Sin embargo, nunca la habíamos desnudado de esta manera o mejor dicho, la pandemia nos la ha desnudado. No somos ni tan tolerantes, ni tan inteligentes, ni tan preparados. Sin buscar en específico en ninguna escuela de la psicología, podemos revisar lo acontecido en Sinaloa, sobre todo en los últimos meses, no tanto en nosotros como personas individuales, sino desde el carácter social, pues al final eso es lo que somos: “zoon politikon”. Cada quien puede describirse. El liderazgo en Sinaloa, por citar un ejemplo, se está poniendo a prueba, se está tasando de varias maneras pero en especial hay una que, de forma voluntariao involuntariarecae sobre el gobernador de Sinaloa. La razón es simple. Entre la verdad y el mito, el pueblo sinaloense siempre se ha medido a través de sus gobernantes, a los demás siempre nos ha tocado otear pasivamente nuestro propio acontecer. Recuerdo el mote que comentaristas deportivos ofrecían de la selección nacional de futbol, era contundente: los “ratones verdes”. Nos sintetiza, somos como los personajes de “Kafka” quien fabuló alguna vez sobre un pueblo de ratones. Sin duda necesitamos de manera voluntaria o involuntaria a nuestro flautista Hamelin, necesitamos seguir a alguien y por eso exigimos curiosamente lo que no tenemos: sentido y dirección. Las redes sociales, son una especie de laboratorio enorme en donde se muestra de forma ejemplar lo que deseamos pero nunca hemos podido ser: personas conscientes, libres y capaces de elegir. Es a través de ellas, que la mayoría se expresa con libertad y confianza. Todos (sin excepción) se sienten como “Job”y se consideran buenos, razón por la cual les molesta que ni la fortuna, ni la voluntad de los líderes sea comprenderlos o recompensarlos. Son esta nueva clase elite, los que sin recato alguno y, a través de las redes sociales, ofenden a un gobernador que ha sido demandante de seriedad y respeto a sus instituciones. El pueblo sinaloense siempre ha depositado en la figura de nuestro gobernante local, que sin duda, ha optado por ofender, denostar y cuestionar a esa figura. La política, ahora es una palabra hueca y vacía, carente de sentido, contenido y aspiración, pues las divisiones entre los privilegiados del poder y los sin esperanza, sea pueblo bueno o no, se manifiestan en ofensas y agravios, esto, lacera a la sociedad aunque hagamos oídos sordos para escucharlo. No se necesita crear ansiedades, que inhiben la verdad y la credibilidad de la misma, por eso que, a diferencia de este gobierno que ha permeado con cosas positivas, siempre se le busca el lado negativo que se respeta, bueno eso piensan los detractores. ¿Consideran pertinente crear ingobernabilidad para perpetuarse en el poder? Urge en consecuencia, encontrar la cohesión de la sociedad. La respuesta a las convocatorias para manifestar inconformidades sobre el manejo del poder ejecutivo orquestadas en las redes agudizan la división y el conflicto, pero sobre todo, muestran un camino que no debe ser ignorado, la alerta a tiempo, del descontento social. ¿Será posible que los detractores locales puedan sustituir esa ya obsoleta falacia de las fake news? ¿Podrán los liderazgos locales, con la mediación de la sociedad civil en el ámbito de sus respectivas responsabilidades encontrar un escenario menos hostil debido a la epidemia que estamos enfrentando? 

 
 

GOTA Y CHISPA: 

 
 

Más que un gobierno estable, nuestra preocupación de lo antes citado es que continúa gran parte de nuestro sector informativo ajeno al interés general. Sin embargo, alguna parte de nuestros medios están dedicando su atención, de manera preferente a la ingobernabilidad, al reparto del protagonismo y los puestos públicos entre los políticos como si esto fuera lo que más interesa a los votantes pero no en la denuncia de la falta de soluciones viables a los problemas básicos de la población y la gravísima incapacidad gestora de muchos legisladores…. La competitividad de la economía, incentiva la creación de empleo en el sector productivo, que como base del equilibrio de las finanzas públicas es importante también argumentarlas, a través de un ejercicio de gobierno más eficaz y facilitador. El periodismo político, antes de las elecciones debería hacer una valoración de los candidatos con un análisis de su capacitación técnica y sus propuestas de gestión pública: economía, educación, justicia, servicios públicos. Finalizando con un examen y una valoración sobre la calidad sobre su desempeño en los tres órdenes de gobierno, sus deficiencias y sus costes. “Nos vemos Mañana”… 

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