Cuén: el amigo sinaloense...
Por Benjamín Bojórquez Olea 14 Noviembre 2022
Sobre el camino
No lo consideramos una persona extraordinaria, ni tampoco un fuera
de serie, solo es una persona común a los mortales, con ideas simples,
decidido, hombre de palabra. Cuén ha llevado una vida sencilla
dentro de la política, tampoco hay monumentos y calles dedicados al maestro en
ciencias, y lo más probable, a mi criterio, su nombre no quede olvidado ante el
pueblo sinaloense, pero lo sentimos muy "A gusto", como
alguien que ha tenido éxito y logros en la vida privada y pública, lo vemos
bien, tal vez como nunca antes.
Cuén ha tenido que separar a su familia de asuntos que tienen que
ver con la política, sin embargo, su esposa y compañera de fórmula, Angélica
Díaz de Cuén, lo acompaña como fruto sólido y le hace compañía al éxito en
el que se han encaminado para buscar y diversificar el bien común de la
sociedad sinaloense, pero que aman su trabajo y a sus hijos y nietos, donde
encuentran el motivo o excusa para dedicarles su tiempo y entregarles parte de
su corazón, y eso para Angélica y Héctor,
considero, es más que suficiente.
A Cuén le han
sucedido cosas que no se merecía dentro del campo de la política, entre errores
y aciertos, pero sus retos y su terquedad le han enseñado que es más fuerte de
lo que cree, y mírenlo, aquí está luchando para que un día las circunstancias y
condiciones políticas le brinden la oportunidad de llegar al escaño político
más importante de Sinaloa, siempre listo para la próxima batalla.
Cuén tiene la edad suficiente para no estar pendiente de muchas cosas,
sin embargo, no tiene por qué aclararle a nadie lo que sus logros le han
brindado a base de tesón y ahínco. En este momento de su vida política tampoco
debe preocuparle si lo quieren o lo odian, es normal en política, vive su vida
sin hacerle daño a nadie.
Cuén debe saber que hay mejores que él, sin embargo, no compite
con nadie, corre su propia carrera, porque si algo le ha costado al ex rector
de la máxima casa de estudios (UAS) es que a veces las
personas que no coinciden políticamente con él, es porque la amistad y
circunstancias se construyen mucho antes.
Cuén ha experimentado que no es ajeno a pleitos estériles, todas
las cosas que tienen algo de dificultad, que parecen imposibles las traduce con
el paso del tiempo, a mi juicio, eso le ha dado dulces salidas a muchas amargas
dificultades.
Cuén disfruta su momento y consideramos que le da gusto que le vaya
bien a los demás, Incluyendo a sus detractores, el sol sale para todos, la vida
no es una competencia, es una bendición de Dios.
Cuén es un hombre feliz, porque no tiene una imagen falsa que
mantener, lo que ven, es lo que hay, algunos días son increíbles, otros no son
tan placenteros, pero mezclando la tolerancia, el conocimiento, el impulso, el
entusiasmo, exigiéndose siempre con sencillez, congruencia, serenidad, aplomo,
sensatez, eficacia y eficiencia.
GOTITAS DE AGUA:
Ya veo a Cuén el 24 y 31 de
diciembre, sentado solo, con el celular en la mano, viendo como toda su familia
son felices en sus sagrados aposentos decembrinos, quizás alejado un poco del
bullicio, dándose cuenta que hay personas que no dan un paso por él, tal vez la
amistad no sea la mejor ya que algunos actores políticos han tomado caminos
distintos, pero jamás dará la espalda en momentos difíciles, porque aquí
aplica, en la vida hay tres tipos de personas que se olvidan de ti: los
malagradecidos, los que ya no te necesitan y los que nunca te quisieron.
Para Cuén, nunca ha
sido demasiado tarde para valorar a un militante de su partido político de
pensamiento (Centro – Izquierda) que le ha abierto brechas en
el territorio estatal incluso nacional, determinando que no se encuentra una
misma persona dos veces. Cuén, a mi juicio, desde hace
mucho dejó de creer en promesas, ahora solo cree en sus acciones, porque una
cosa es decir y otra cosa muy diferente es hacer.
A Cuén lo quieren
y lo odian sin importar lo que la historia política decida. "Si
cierran la puerta, apaguen la luz". "Nos vemos Mañana"...