Opinion

Cynthia Villarreal, en pro de la evolución de las microfinanzas en México

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Por Anabella Pezet 12 Septiembre 2018

El caldero político

Apenas con 37 años, Cynthia Villarreal Muraira, actual titular del Programa Nacional de Financiamiento al Microempresario y a la Mujer Rural (PRONAFIM) de la Secretaría de Economía, es un poco sui géneris, no tiene el típico prototipo de mujer que trabaja hoy en día en el gobierno, pues ella viene de la iniciativa privada.

Estudió la licenciatura en Comercio Internacional en el Tec de Monterrey; desde temprana edad comenzó a laborar en la empresa Cemex, líder global en la producción y venta de cemento, concreto y materiales para la construcción. Inició su carrera en un área muy dinámica, competitiva y de muchos retos, el área de Planeación Estratégica Corporativa. A ella le tocó radicar en Madrid, pues dicha división se compartía entre la ciudad de Monterrey, Nuevo León, y la capital de la Madre Patria.

En 2007 le tocó formar parte del equipo que planeó el acuerdo para comprar la empresa australiana Rinker Group Limited, cuya transacción fue de 15 mil 300 millones de dólares, convirtiendo a Cemex en la empresa número uno del mundo en la venta de cemento. Un año después, le tocó sortear la crisis económica de 2008, desde donde se tuvieron que tomar medidas internas en la empresa para afrontarla. Cemex significó para ella un gran reto intelectual, sin embargo, quería explorar nuevos horizontes, desde donde pudiera ayudar a la gente.

Villarreal regresó a su natal Monterrey a trabajar a una organización no gubernamental (ONG) llamada Vía Educación, fundada por ex alumnos de la Universidad de Harvard. Contenta con el nuevo reto, porque además le gusta que su trabajo tenga gran impacto social, comenzó a involucrarse con el principal objetivo de dicha fundación que es el empoderamiento de los niños y jóvenes. Ella estaba a cargo de la evaluación de los programas.

Tiempo después, en 2010, un antiguo compañero de Cemex la invita a colaborar en la Secretaría de Economía. Ella aceptó este nuevo reto pues lo define como “el justo medio entre Cemex y la ONG”, entre el sector privado y la fundación para ayudar a las comunidades. Le gustó tanto, que decidió  irse a estudiar dos años una maestría en Políticas Públicas a la Escuela de Gobierno de Harvard, donde se especializó en en Desarrollo Económico y Político. Considerada como la tercera mejor universidad del mundo, según el QS World University Ranking, la maestría le otorgó a Cynthia una visión más global de los problemas que hay que resolver en las distintas materias. Además de las personalidades que conoció, que hoy le sirven como contactos en todo el mundo.

Después de concluir su estancia en el extranjero, Cynthia Villarreal regresó en 2013 a laborar de nuevo a la Secretaría de Economía, nada más que con un nuevo gobierno. El secretario Ildefonso Guajardo la invitó a integrarse en su equipo, primero en la Subsecretaría de Comercio Exterior y después como su Jefa de Oficina, puesto en el que duró un año. Desde ahí logró formarse una visión completa de cómo funciona el sector Economía del país. Durante ese tiempo, acompañó al secretario a todas sus reuniones, por lo que aprendió mucho de él, forjándose con un alto nivel de exigencia, profesionalismo y calidad.

Posteriormente, hace poco más de tres años, Villarreal recibió la oportunidad de ser la titular del PRONAFIM. Este programa depende directamente de las oficinas del Secretario de Economía. El objetivo es promover la productividad de la microempresa mexicana, a  través de las microfinanzas. Este programa fondea o presta a financieras, en su mayoría a Sofomes y Sofipos, y éstas a su vez, dispersan el recurso en forma de microcrédito.

Este programa nació hace 17 años, cuando el ex presidente Vicente Fox prometió apoyar a “los changarros” del país. Desde entonces, se creó un sector microfinanciero en México que ha apoyado miles de historias de éxito en el país. De hecho 95 por ciento de los créditos son a mujeres y prestan a tasas de interés un punto arriba de los Cetes.

Todas las líneas de crédito que el PRONAFIM otorga a las intermediarias financieras, van condicionadas a objetivos de políticas públicas definidas. La más solicitada, es la que vincula el microcrédito con capacitación en materia de educación financiera y empresarial, en la cual al menos, el 50 por ciento de las personas que financian deben ser capacitadas. A su vez, la institución ha desarrollado puntos de control y supervisión para asegurar el buen ejercicio de los recursos.

El resto del fondeo también está condicionado para asegurar que el microcrédito llega en mejores condiciones a la población objetivo. Es decir, una línea de crédito que pide que el microcrédito se otorgue con menores tasa de interés, otra que pide que el microcrédito llegue acompañado de ahorro con capacitación, u otra que incentiva su presencia en zonas donde no existe la banca comercial, y se fomente la competencia. Otras dos líneas van dirigidas exclusivamente a mujeres.

Mediante el otorgamiento de estas líneas crediticias, en lo que va de la presente administración el PRONAFIM ha canalizado 12 mil 283 millones de pesos a financieras, para que éstas entregaran más de 5 millones 37 mil microcréditos, en beneficio de más de 4 millones 69 mil personas.

Asimismo, el PRONAFIM tiene mapeado el costo de las tasas de interés en todo el país, incluso por municipio. No es lo mismo prestar dinero en Iztapalapa que en la Sierra de Oaxaca. Tampoco es lo mismo que una Sofom pequeña preste dinero, a que una Sofipo que tenga mayor infraestructura y tecnología lo haga. Lo que hace el programa es encontrar soluciones de mercado que incentiven bajas tasas de interés, a través de las líneas estratégicas, aunque Villarreal está convencida que la capacitación es una de las mejores herramientas para lograrlo.

La pasada Feria de PROFAFIM, celebrada apenas a hace unos días en el Palacio de los Deportes, recogió cientos de historias de éxito en nuestro país. Está el caso de Jeanet Meneses, un caso de éxito de “incubación”, cuyo padre se dedica a la agricultura de tunas; al tener excedente de producción ella empezó a usar el xoconoxtle que sobraba para poder hacer mermeladas. Con el apoyo del programa, hoy en día, ella es una microempresaria exitosa que en poco tiempo ha logrado posicionar su propia marca, inclusive una línea gourmet.

Está otro caso de una mujer llamada Jeanette Damian que es dueña de “Gorditas Rincón Za-ktkno”. La familia de Jeanette enfrentó la falta de recursos en su familia, ella solicitó el microcrédito para cocinar y vender unas gorditas muy ricas, que se volvieron famosas. A pesar de enfrentar diversos obstáculos y adversidades, a través de su ingenio y creatividad logró sortearlos, y hoy en día vende cientos de gorditas en Ecatepec, incluso ya tiene servicio de catering a empresas y escuelas en el Área Metropolitana de la Ciudad de México.

Finalmente, Cynthia Villarreal sabe que las microfinanzas todavía tienen mucho espacio para mejorar. Reconoce que la innovación es necesaria para ofrecer más y mejores servicios microfinancieros que realmente se adapten a las necesidades de la población microempresaria (en lugar de que la población se adapte a los productos). Villarreal está convencida de que el trabajo realizado por el PRONAFIM ha sido fructífero y de gran impacto para la sociedad en nuestro país, pero que está en manos de todos los actores, continuar impulsando mejores apoyos a un segmento vulnerable de la población.

DERECHO DE RÉPLICA

Me contactó la señorita Verónica Ferreyra Cuevas, solicita su derecho de réplica sobre mi blog publicado la semana pasada sobre una explosión de la empresa Gas Natural Fenosa (hoy Naturgy) en su departamento en León, Guanajuato. A continuación, transcribo lo que me comenta:

“En septiembre  de 2016 los condominos de la colonia Hidalgo del Valle, recibieron un diagnóstico de Protección Civil y avisaron a través de los administradores de los edificios, que algunos tanques estacionarios que almacenaban gas LP habían culminado su vida útil. Por lo que sugerían la opción de cambiarlos por unos nuevos o contratar el servicio de gas natural.

La empresa Gas Natural FENOSA ya tenía avisos y oficios visibles avisando de las obras para introducir  los ductos que abastecen el servicio.

Cabe mencionar, que la estación del sistema de transporte que se encuentra frente a dicha colonia ya había sufrido percances para esa fecha, como lo advirtieron diversos medios de comunicación locales en la colonias Valle de León  y una explosión mas en Ciudad Aurora.

Muchos vecinos se oponían a que ingresara dicha empresa a Hidalgo del Valle, sin embargo, la presión de la gasera al Jefe de Colonos pudo más que los riesgos que muchos usuarios advertían.

A partir de ese momento, los vendedores iniciaron la labor de convencimiento con las familias, ofreciendo esquemas de pagos accesibles y descuentos por contrato a pesar de no contar con los tramites y permisos para operar del municipio.

Así, que ofrecían garantías por escrito a quienes hicieran contrato de gas natural  y advertían que en caso de no gustarles el servicio podrían retirarlo sin penalización para los usuarios.

Pasaron los meses y no instalaron en el departamento 1 de la torre G, porque no tenían ni material ni permisos para abastecer un servicio acordado y corroborado con ingenieros convencían a la gente de la seguridad que aparentemente ofrecía la empresa.

El cambio de gas LP a Gas natural fue acordado por la Propietaria del inmueble y la arrendataria que seria quien se encargaría de abrir a los instaladores para dejar activo el servicio de gas natural.  

Pasaron los meses y fue hasta diciembre que acudieron a instalar el combustible en la estufa y calentador.

El 13 de diciembre ocurre el accidente que priva a una familia de su salud y pone en riesgo la economía de varias más.

El contrato de dicha finca fue alterado por vendedores o llenado para cumplir con el trabajo de empleados de la misma.  Ya que pusieron nombres de usuarios de la toma de personas que ni los habitantes del departamento conocían o la arrendadora.

Tras el suceso la empresa a través de los abogados Rodolfo Pérez Velázquez y Patricia Aurora Almada Beltrán, han realizado una dilación para que los culpables, instaladores de la gasera no se vinculen a proceso.  Ya se han celebrado 6 audiencias iniciales desde enero del presente a la fecha, donde la Juez de oralidad los suspendió por carecer de habilidades técnicas para la defensa de los inculpados. Con una investigación de la fiscalía en curso y un juicio de amparo de  suspensión admitida por un juez de distrito, que no permitió que la audiencia inicial se celebrara el 24 de julio de 2018 por sexta ocasión, los abogados de la gasera continúan complicando la justicia para las víctimas y que la empresa no pague las consecuencias  de la mala instalación de un servicio contratado para prevenir el riesgo advertido hace 2 años por protección civil".

Verónica Ferreyra

Víctima de daños

Causa penal 1P2017-1515

Quedo a tus órdenes para cualquier información o prueba de lo aquí descrito

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