¿De edil a subalterno?
Por Benjamín Bojórquez Olea 22 Abril 2022
Sobre El Camino
Tal pareciera muy prematura esa posibilidad que conforme se acerquen los comicios de 2024, en "Tierra Santa", Salvador Alvarado, el alcalde en turno, Armando Camacho Aguilar, tenga dos disyuntivas, aparecer en las boletas para su reelección o una candidatura a la diputación local, o bien, pasar hacer un funcionario de primer nivel o segundo nivel de la localidad del municipio, o también regrese a la docencia.
Este análisis tiene varias interrogantes basadas en la historia política del alcalde Guamuchilense, ya que la traición ha sido parte de su historia pública, si voy mal me regreso.
En una de mis columnas relacionadas a la conducta política del edil Alvaradense comentamos la probabilidad que Armando "el iguano" Camacho emigre a otro partido político al verse acorralado en un laberinto sin salida, esto se atribuye a que no cuenta con las simpatías de los altos mandos del gobierno estatal.
El PAS sería una opción para el edil, lo cual representaría una derrota anunciada, ya que jugaría en contra del gobierno federal, estatal y local, ¿pero tiene otra salida? A mi criterio pienso que sí, sin embargo, su desobediencia ha sido su peor enemigo desde su gobierno de transición, ya que al elaborar su gabinete incurrió en desaciertos al nombrar personajes "non gratos" para las altas esferas estatales. En pocas palabras, no fue hábil el alcalde en turno, ya que a los amigos en ocasiones se les sacrifica.
Se dice que cuando se pierde la confianza se pierde todo, más cuando en política recurres a la traición e irreverencia, con el ingrediente que los que gozan con el aprecio y cariño de los que mandan, también podrían ser sacrificables, pero aún las condiciones y el tiempo se aferran para incluir dentro de las circunstancias políticas a dos personajes que si gozan de la máxima confianza del Ejecutivo estatal, el diputado local Ambrosio Chávez y el presidente Angosturense, Miguel Ángel "el profe Mayke".
Por otro lado, cuando te sientes confinado, lo mejor sería replegarse y bajarle dos rayitas a tu disciplina política, para que, en ello, alcances un cargo público de ganar las elecciones en el 2024. Porque bien dicen, "si no puedes con el enemigo, pues me uno a él".
Pese a que su gobierno tiene poco tiempo, el desgaste político por las acciones centralistas del edil han causado escozor y una clara diferencia para pasar de presidente a subordinado, pues la verdad hemos sido testigos de nada relevante para el municipio en materia de infraestructura, si bien la delincuencia organizada se encuentra en sueños por así decirlo, la campaña del edil inaugurando días festivos ha sido una clara justificación y una agenda de relleno tras no tener un plan estratégico para el desarrollo del municipio.
Por ningún lado se ve una transformación por parte del alcalde Alvaradense, la incapacidad para administrar y gobernar el municipio es un claro testigo de las diferencias que se tienen con el edil, pues no hay proyecto, pero mucho menos, una confianza que permita que las puertas de las dependencias del estado y de la federación estén abiertas para el presidente de Salvador Alvarado. Lo dicho, ni confianza, ni relaciones ante el poder de izquierda, más bien un intruso que llegó por la marca y la delincuencia organizada.
A mi juicio no hay una comunicación dentro del Ayuntamiento, esto también permite que, a nivel federal y estatal, existen organismos que propician un adecuado desarrollo económico, pero los municipios son víctimas de las inercias y falta de información de lo que la comunidad municipal requiere, siendo por este que vemos graves problemas de desempleo y emigración a otras zonas del estado, del país y del extranjero.
Pero mientras no exista una visión clara para ejecutar un plan gubernamental existirá en detrimento un claro deterioro en el desarrollo del municipio.
La lucha está muy evidente, pensar mucho antes de tiempo en la siguiente elección, permite que los duendes salgan de noche y te casen y, por ende, te arranquen la cabeza mucho antes de tiempo, pues mientras el municipio se mantenga pasivo y con mucho ánimo y contacto social en la periferia, al interior del Ayuntamiento de Salvador Alvarado se torna tensa y con algunas diferencias políticas y laborales, esto es debido a los intereses personales del presidente en turno.
GOTITAS DE AGUA:
Por ello nos adelantamos y vemos una muy posible traición del mandatario Alvaradense, en donde el destino lo envíe al partido sinaloense o regrese por la puerta de atrás al partido de ultra derecha que tanto le dio, ya que no se ve por donde pudiera encontrar un espacio para colarse en una posible reelección o una diputación local a través de la plataforma de Morena. Insisto, con el agregado, de que no cuenta con las simpatías de las altas esferas del poder estatal, nos comentan.
¿Será que ya daría su brazo a torcer en lo oscurito? Todo eso lo sabremos más adelante. Por lo tanto, su prestigio político dentro de la 4T no es el mejor, al contrario, aumenta significativamente, pues en política no se puede jugar con Dios y el Diablo a la vez. Eso es pecado capital.
Entonces, ¿pasará de edil a subordinado el alcalde Armando Camacho Aguilar? El tiempo corre y no se ve una inclinación para que así suceda, por ello es pertinente que cambie su conducta y se ponga a trabajar "NO" solo en lo político, sino en un proyecto de infraestructura, para que permita que se desarrolle el municipio para bien de la localidad. De lo contrario estará cavando su tumba política, en donde más de uno opina que está confundiendo el agua con el aceite. Y esto da para mucho más. "Si cierran la puerta, apaguen la luz". "Nos vemos el próximo Lunes"...