Diálogos por México: Reiteran la responsabilidad de reconstruir un frente opositor
Por Ricardo Fuentes Lecuona 24 Octubre 2022
En éste, participaron algunas de las personalidades más significativas del PRI
Así las cosas… Los días 17 y 18 de octubre, el Partido Revolucionario Institucional llevó a cabo el conversatorio “Diálogos por México” en el Auditorio Plutarco Elías Calles. En éste, participaron algunas de las personalidades más significativas del partido, con la meta de presentar propuestas y agendas políticas apuntadas a los futuros procesos electorales de 2023 y 2024.
Entre las y los ponentes, se destacan las participaciones de 4 líderes y lideresas tricolores que representan, entre otras cosas, un nuevo impulso hacia una alianza opositora, un replanteamiento de la posición económica e internacional del Estado mexicano, mejores formas de hacer política, y una apertura a procesos de introspección y autocrítica que busquen reconciliar a la población bajo un manto ideológico progresista, incluyente y democrático.
El destape de Beatriz Paredes
Comenzando con el discurso de la Senadora Beatriz Paredes Rangel el lunes 17, participación que posiblemente haya sido la más resaltada de todo el conversatorio, se hizo la presentación de un diagnóstico desfavorable al actual rumbo de la democracia mexicana y expresó una profunda preocupación a lo que consideró una “posible elección de estado” en 2024.
A partir de ésto, hizo un llamado a abandonar los intereses personales y concretar un “gran bloque nacional”, que haga frente a las tendencias clientelares, populistas y autoritarias del actual régimen.
Dentro de sus propuestas, demostró un interés por abanderar las causas federalistas y de descentralización fiscal, proteger a los órganos constitucionales autónomos, y recuperar el estado de derecho.
Para lograr estas metas, la Senadora Paredes Rangel expresó su interés por la candidatura presidencial opositora, diciendo: “Desde esta trinchera expreso con humildad y con decisión que aspiro a ser candidata a Presidenta de la República, a encabezar una gran alianza entre los partidos políticos, con la sociedad civil; un frente amplio de los hombres y las mujeres democráticas de México. ”. Además de su “autodestape”,
Paredes Rangel se manifestó a favor de que la designación de la candidatura a la presidencia sea llevada a cabo “con un piso parejo” y a través de procesos democráticos como elecciones primarias.
El posicionamiento de la Senadora es, sin lugar a dudas, una jugada ambiciosa, que implica profundos y necesarios cambios a la realidad orgánica de los partidos políticos de oposición. Repensando dónde estamos y dónde queremos estar.
El día lunes vió, además, la participación del estadista José Ángel Gurría, quien desde 2006 y hasta el año pasado, se había desarrollado como Secretario General de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). El también exsecretario de Hacienda y de Relaciones Exteriores, buscó hacer un análisis de la realidad económica en la que se encuentra el estado mexicano, particularmente con relación al tratado de libre comercio y la crisis económica mundial causada por la pandemia y exacerbada por la guerra en Europa del este.
Gurría hizo mención del estancamiento económico al que se enfrenta México, los obstáculos que ponen en riesgo al bienestar económico de la nación y el impacto que ha tenido la política fiscal y económica del actual sexenio, además de demostrar una intranquilidad ante los nuevos nombramientos en materia de negociación económica con EEUU y Canadá, declarando: “Es el peor momento de tener disputas comerciales con nuestros socios del T-MEC, o de generar dudas en el mundo entero”.
El exsecretario, además del acercamiento económico, presentó una importante reflexión sobre el impacto del crimen organizado en el desarrollo del país; reiteró que la escala del problema de seguridad en México es una amenaza directa a la democracia, y que la planeación de políticas centradas en la militarización y las “fuerzas reactivas” no ha brindado, ni brindará los resultados de seguridad esperados. Ya que, para alcanzar mejores niveles en materia de seguridad, México ha de asegurar tres factores principales: El primero: policías locales efectivas. El segundo: autoridades que siembren confianza en la ciudadanía. El tercero:
Una política de seguridad coordinada y a cargo de civiles, no de las fuerzas armadas. Por último, Gurría se sumó al llamado de la Senadora Paredes al invitar a los líderes de los partidos de oposición a reanudar un frente unido ante el oficialismo en los futuros procesos electorales, declarando: “Es prioritario, indispensable, irremplazable e implacable, restituir, reconstruir y definir las bases sobre las que funcionará la alianza Va por México, tanto frente a las elecciones locales en 2023 como para las legislativas y presidenciales del 2024”. “No tengo miedo, sí me atrevo, y ¡estoy lista!”
Entre las ponencias del martes, resaltó el conmovedor discurso de la Senadora Claudia Ruiz Massieu. En él, la exsecretaria de Turismo y Relaciones Exteriores proclamó su deseo por abanderar un proyecto común entre los partidos políticos opositores y la sociedad civil.
La senadora hizo una importante reflexión sobre el estado del partido y de la política nacional, en la cual recordó emotivamente a su padre como la fuente de su vocación, principios y valores.
Dentro de esta reflexión, la exdirigente del partido reconoció que el PRI vive la crisis más profunda de su historia, con números de representantes en el poder legislativo, gobernadores y alcaldes en mínimos históricos.
Para solucionar estos problemas, y “rescatar a México de una vez por todas” Ruiz Massieu propone congruencia, inteligencia y una oposición unida y valiente “que no se doble ni se venda”. Sobre el futuro de la política opositora, la senadora proclamó un discurso al que ninguna paráfrasis puede hacerle justicia, por lo que lo presento en sus palabras: “Quiero encabezar el proyecto de un México plural, incluyente, liberal y que construya un mejor país para todos y todas.
Quiero abanderar el proyecto de los priistas que aman al PRI y de los que ya se fueron, de los panistas que quieren una patria ordenada y generosa, de los perredistas que han militado en las causas de la justicia y la democracia, de los emecistas que hacen política fresca y ciudadana y de vanguardia. de todos los millones que no militan en ningún partido, de la sociedad civil que con coraje y con valor por décadas han visibilizado las causas más justas y han exigido cambio, justicia y políticos más dignos y transparentes.
Quiero encabezar el proyecto de quienes estamos hartos de tanta destrucción y tanto capricho, de todos los que no queremos un México dividido y enojado. ¡Soy Claudia Ruiz Massieu y no tengo miedo, sí me atrevo, y estoy lista!”
Este contundente discurso, que se ganó el aplauso de los presentes, representa un respiro de aire fresco para quienes estamos en búsqueda de líderes políticos que luchen por una oposición unida, que sean congruentes y estén abiertos a las demandas, peticiones y necesidades de la sociedad civil, que no vean por sus propios intereses, ni por los de sus partidos, sino por los de todos, incluyendo tanto a quienes votan por ellos, como a quienes no.
La solución a los problemas políticos de nuestro país no es más odio, no es más polarización, no es más rencor ni más imposición. La solución es un esfuerzo unido, conjunto, multipartidista que busque reconciliar a todos los sectores de la sociedad, por el bien de México. Villegas inspira y da esperanza.
También en la tarde del martes, participó el recién inaugurado gobernador de Durango, Esteban Villegas Villareal. En su discurso, Villegas habló sobre su impresionante victoria electoral este verano, en la cual logró un aplastante triunfo sobre la morenista Marina Vitela por 15 puntos porcentuales, a pesar de haber radicado en constantes empates técnicos e incluso hasta 20 puntos por debajo de ella en ocasiones durante las encuestas de campaña.
Su modelo de coalición, de apertura y de modestia presenta una pauta para las futuras candidaturas y gobiernos en coalición que logren vencer a la “aplanadora” de Morena, además, hizo un acertado llamado a “dejar de hacer política con dinero” señalando que ésto lo puede hacer cualquiera, que el verdadero cambio en la realidad política y social de este país no se compra con dinero ni despensas. Sino que se gana con esfuerzo, con transparencia, con diálogo, y con unidad.
Villegas exhortó a los líderes y lideresas del partido tricolor dejar de lado los egos, la soberbia y las ambiciones personales, y buscar construir un partido que refleje unidad, cercanía, cooperación y democracia, resaltando que la firmeza es una característica fundamental de un movimiento político que debe estar unido y ser congruente.
El gobernador duranguense representará el ejemplo a seguir para quienes buscan ingeniar un frente opositor y un bloque unificado de partidos y líderes que pueda hacerle frente a la amenaza existencial que representa el populismo autoritario. “A los priístas no nos tiembla la mano” aseguró el gobernador, quien, cabe mencionar, negó completamente subirse al tren de los aspirantes a la candidatura, reiterando su compromiso con el cargo al que los y las duranguenses le han otorgado por los próximos 6 años.
En fin... Dentro de los destapes, de los emotivos discursos, de los señalamientos y los diagnósticos, se encuentra un importante mensaje de los futuros líderes y lideresas del Partido Revolucionario Institucional.
Un deseo de reforma, un empujón hacia la renovación de un frente político multidimensional y pluripartidista, que represente nuevas maneras de hacer política basadas en el diálogo y en la reconciliación, en la transparencia y en la democracia que pueda hacerle frente a la crisis política, organizacional, económica y social a la que hoy nos enfrentamos.
Si bien las y los aspirantes a contender en 2024 son diversos, todas y todos coinciden en la responsabilidad que tienen los partidos de oposición a formar un bloque unido, fuerte, congruente y democrático que abandere las causas de la sociedad civil, vele por los derechos humanos, y procure cuidar y fortalecer a nuestras instituciones, nuestra democracia y nuestro bienestar.
Esta tarea implica abandonar los egos, los rencores y la soberbia, implica que nuestros partidos y líderes de oposición se vean en el espejo y sean capaces de reconstruirse y cumplir con su encomienda como defensores de una sociedad que hoy en día teme por su futuro, por su libertad, por sus derechos y por su democracia.