Opinion

Hospitales públicos sin medicinas ni jeringas

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Por Juan Manuel Partida 02 Diciembre 2022

Altoparlante

 

Hospitales públicos sin medicinas ni jeringas en Culiacán, es el encabezado de una nota publicada el día de ayer por el periódico Noroeste.

Es noticia importante, aunque no sea novedad.

El sistema de salud tiene años abandonado irresponsablemente por la cuarta transformación.

Eso de que en 2019 estaríamos como en Dinamarca fue una burla enorme, que el presidente recicla una y otra vez con nuevos plazos futuros que nunca llegan.

La promesa más reciente fue que a fines del 2023 estará todo excelente, pero ya sabemos que nos volverá a fallar el que una vez advirtió incluso que se cambiaría el nombre, y tampoco cumplió.

Por más que se laven las manos, esa austeridad ha provocado la muerte de gran número de mexicanos y el deterioro de la calidad de vida de muchos más.

La realidad es terrible, porque tampoco hay tratamientos ni equipos suficientes, con un montón de etcéteras.

Por eso vemos que las cirugías se programan dentro de varios meses y luego cancelan con pretextos a veces ridículos.

Pacientes y familiares nos denuncian que últimamente la “recomendación” de los doctores o de los responsables de las farmacias de los hospitales públicos es de que compren ellos las medicinas porque esperar a que les surtan es un sueño guajiro.

La irresponsabilidad es brutal, porque se nos miente con descaro y arman con todos sus cómplices una defensa masiva para decir que las cosas están de maravilla.

Con el aplauso de los chairos y de quienes vendieron su conciencia por las becas o pensiones del “bienestar”.

Un detalle que no impacta en los servicios de salud, pero sí ilustra los valemadrismos del gobierno es encontrar que la página web de la Secretaría de Salud tiene buen rato sin actualizarse -es violatorio de la ley- y nos muestra todavía como titular a Alfredo Román Messina.

Lo puede usted ver en: http://saludsinaloa.gob.mx/saludsinaloa.gob.mx/sitio/organigrama-ssa.html.

El abandono en el sector salud continuará, porque tenemos presidente, gobernadores, alcaldes y legisladores a los que no les importa ni tantito la salud y la vida de los mexicanos.

Son buenos para los atoles y las maromas, con sus otros datos del México inexistente.

 

¿TRAIDORES EN LA FISCALÍA DE JUSTICIA?

 

Duro señalamiento del gobernador Rubén Rocha Moya sobre filtraciones oficiales a favor de los asesinos materiales e intelectuales del periodista Luis Enrique Ramírez Ramos.

La fiscal general de justicia Sara Bruna Quiñónez precisó que varias veces estuvieron a punto de detener a los responsables del homicidio, pero que “inexplicablemente” no se ha logrado.

Con el anuncio de que iniciaron una investigación para encontrar a los supuestos traidores.

Y entonces, no hay más que dos sopas.

O hay funcionarios vendidos, o es solamente un pretexto con el que se intenta evadir lo inservibles que son.

 

ROBAR VOTOS EN TODO EL PAÍS, ORDENA AMLO

 

Ya se sabe que Andrés Manuel López Obrador juntó recientemente a gobernadores, alcaldes, diputados y senadores que le son leales.

La orden tajante -sin querer queriendo- de que hagan “lo necesario” para ganar las elecciones.

No necesitó precisarles lo que tienen que hacer, pero queda muy claro que no existen límites.

Acarrear votantes, robar urnas, manipular resultados, comprar “opositores” y todas las mapachadas posibles para terminar con el “haiga sido como haiga sido”.

Si entre ellos mismos se roban los sufragios, qué podemos esperar los ciudadanos que aspiramos a que se vayan al rancho de Palenque.

Tienen los focos rojos encendidos, porque sus encuestas entre potenciales votantes los muestran muy por debajo de los estudios cuchareados de las agencias “especializadas”.

A propósito de asuntos electorales, Morena y sus aliados aceptaron fueron derrotados, otra vez.

La reforma a la constitución propuesta por su patrón no pasará, y tienen que ir con el plan B.

Que el martes de la próxima semana recibirán en el legislativo la nueva iniciativa de reformas a leyes secundarias.

El propósito perverso es el de vulnerar tramposamente lo señalado en la constitución.

Con lo inconcebible que resulta la lambisconería de quienes alegan que lo que se pretende es tener elecciones confiables con respeto pleno al voto.

Y con los narcos otra vez operando impunemente como operadores electorales, si es necesario.