Imperfecciones políticas…
Por Benjamín Bojórquez Olea 12 Junio 2020
SOBRE EL CAMINO
La mejor política es la de la anticipación. Es una reflexión para meditar en la relativa tranquilidad y paz de la pandemia, confinados en los hogares. Muchas frases no tienen desperdicio, esto conlleva en el ejercicio de la clase política de todos los niveles, colores y sabores. En el mundo de la política pueden aparecer señales relevantes y con una intencionalidad abrumadora en el ejercicio y dinámicas puras, en donde las definiciones electorales que trae el 2021 en Sinaloa pudieran ser depuradas y muy contaminadas. La pregunta no es si habrá rebote de circunstancias y condiciones, sino cuando se notará y si será disparador de otras decisiones impuras o disolutas. Es lo que todos esperan en su fuero intimo (empezando por el propio político) por ser considerado. Pero más allá del absolutismo será crear una expectativa baja, de que cada dato positivo pueda ser celebrado más allá de si alcanza el “target” deseado. Que significa esto, en términos reales, es que la cancha estará inclinada a favor de personas no contaminadas. Aquí aplica este manual político sin distingo alguno. La ingenuidad maligna logra perversidades políticas. Nunca hay que confundir el método con la meta. Ninguna disputa deberá de convertirse en discordia. Quien solo ve el bosque, se pierde en la inmensidad. Quien solo ve el árbol, se pierde en la proximidad. Toda propuesta mina la credibilidad. Las promesas son para no cumplirse. Prometer no enriquece. De lo peor, lo menos bueno. ¿Un Gobierno de relaciones públicas o un Gobierno de relaciones con el público? ¿La imagen o la realidad? ¿La percepción o la solución de problemas? Una agenda que carece de brújula, deja de ser agenda. Un organizador diario nunca será una agenda. La opinión publicada no es la opinión pública. El cuerpo social es trabajo de análisis. El poder ideológico no nace necesariamente del poder político. En efecto: la política es para salirse de las trampas. Anticipar es proyectar. La mejor política: la de anticipación. Tu "bombero" trabaja a posteriori, tu detective a priori. Cuando entra a escena el bombero es porque tu detective se equivocó. El trabajo del investigador, del detective, no es el trabajo de tu asesor de análisis. El primero ve los árboles que se pueden incendiar, el segundo los bosques. Una cosa es el mapa, otra muy distinta es el terreno. Una cosa es teorizar, otra muy distinta aterrizar. Todo es investigable. Bombero, analista y detective, no obstante, deben de detectar los cerillos. Conspira para que todo te sea visible. La visibilidad es la viabilidad. En cuestión de imagen, imponer es necesario, impostar la voz no es necesario. Haz de la loa, lodo. Es más fácil traicionar a César que traicionar a Roma. La grandeza no existe, existe la oportunidad. La política no es una hazaña, es una cotidianeidad. La mejor gente solo es mejor si te rodea a ti. La responsabilidad no se comparte, la irresponsabilidad sí. Rendir cuentas equivale a rendir armas. No prometas el pastel, promete la cereza. La lealtad en política no es un valor. Prepárate intensamente en el arte de la traición. La historia se hace con guerras, no con política. Sé diplomático, asesta el puñetazo. Aprender a ser líder es desaprender a ser humano. En fin, como dicen las coplas: Me han dado un empleo, pero apenas leer sé… Tú cobra el sueldo, y que lea tu secretario. Hasta los palos del monte tienen su separación: Unos sirven para hacer santos y otros para hacer carbón.
GOTA Y CHISPA:
El punto central es que el segundo trimestre del año de este 2020 existe una alta radiación política. Eso derivará en que los números más amigables puedan verse como indicadores perceptibles, ya que la base de comparación sea más benigna y cuando la cosecha gruesa del 2021 tenga un impacto pleno. En el centro, derecha e izquierda habrá contrastes y una guerra discursiva, porque por un lado quieren mantener una imagen que proyecte lo inimaginable para el consumo y humor social, pero a su vez los externos seguirán con su actitud hasta que no se aclare el panorama político. Pero existe una asimetría que no está sobre la mesa y no precisamente es la tracción de votos, sino que esos votos están focalizados en la pelea local, para tener los cortes de cinta paradójicamente organizados. “Nos vemos el Lunes”…