Opinion

INCONGRUENCIAS…

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Por Benjamín Bojórquez Olea 19 Agosto 2019

SOBRE EL CAMINO

La vida política, social y legal en Sinaloa sufre una gran crisis de ingobernabilidad gracias a la actitud unilateral del grupo parlamentario de Morena en el Congreso del Estado, quienes confunden los equilibrios políticos que deben guardarse entre los poderes del estado, con el abuso de poder; Morena con un congreso a modo y con sus acciones legislativas, violenta el estado de derecho y la legalidad de sus actos, caso concreto, se atribuye facultades jurídicas, técnicas y fiscalizadoras reservadas exclusivamente para la ASE, cuyo preludio o antecedente dijera Cantinflas, nace a partir de la no aprobación de las cuentas públicas de todos los Municipios y del Gobierno del Estado, donde es claro que abusando de su mayoría en el congreso invadió facultades jurídicas exclusivas de la Auditoria Superior del Estado, mismas que reitero, recalco y subrayo técnicamente están reservadas para esta dependencia fiscalizadora según la ley de la ASE y la constitución política estatal. Esa conducta de Morena, aunque todavía no ha cado el último round de estos temas, desde luego tiene una gran orientación y sobredosis con fondo político rumbo a la sucesión gubernamental del 2021; estos actos de Morena si bien no mancha a los entes reprobados en sus cuentas, si los tizna, siendo ese su objetivo principal, por el cual ordenó en reprobar a todos los entes públicos citados, pretendiendo con ello quedar bien con la sociedad. Lo que no analiza Morena es que social y políticamente hablando el primer reprobado es el propio congreso por su actitud lesiva e incongruente con la legalidad, donde claramente hasta a la propia ASE reprobaron, no obstante formar parte orgánica del propio congreso, al modificarle los dictámenes que ya se habían aprobado por este organismo aprobando algunas cuentas públicas de Municipios y del Gobierno del Estado, contradicción legal que denosta la falta de comunicación, congruencia y de acuerdos entre la ASE y el Congreso que son causahabientes un órgano del otro. Esa ingobernabilidad legislativa es generada a través de personajes de Morena y de algunos tricolores que le hacen el fuego amigo al Gobierno para pretender debilitarlo, cosa que dudo suceda, y que inhiben el camino de una sucesión adelantada que contiene al menos los siguientes elementos. El primero se manifiesta por pretender generar y encontrar un interés de poder, convulsión, desorden y perturbación mediática y fáctica que termine por confundir a la sociedad contra el Gobierno, lo que jamás ocurrirá puesto que el Gobernador tiene los pies en la tierra y está súper bien posicionado y reconocido por el propio gobierno federal y los Sinaloenses. El segundo podría ser que los grupos políticos de Morena buscan rumbo a la Gubernatura reorientar y posicionar a sus posibles gallos muy desplumados por cierto, bajo condiciones y desequilibrios tanto de derecha como de izquierda, provocando circunstancias a modo para desarticular básicamente la unidad interna requerida para que a Sinaloa le vaya bien, es decir, prefieren que se hunda el barco (Sinaloa) antes que reconocer el buen ejercicio de gobierno del titular del ejecutivo estatal. Un elemento propio de la ingobernabilidad es la ilegalidad, es decir, una situación en la que existe una brecha considerable entre la realidad y las leyes eso está generando Morena en Sinaloa. Otro elemento negativo de Morena y aliados es pretender desacreditar las instituciones o entes públicos del estado para garantizar su digclerica permanencia, eso está descaradamente a la vista de todo mundo, y ellos no se ven la cola como la zorra. Derivado de lo antes citado, Morena usa elementos de ineficacia política, de inutilidad e incumplimiento bajo conjeturas y niveles descarados y cínicos, donde los círculos sociales se convierten en pasión y una nueva emoción anticipada hacia la sucesión del 2021. Además, existe una batalla política de propaganda que admite todo tipo de engaños y mentiras justificada siempre por la intensidad de la lucha por el poder. Bajo estas circunstancias, los morenistas pierden credibilidad, información y buscan volverse víctimas de embustes y patrañas alocadas sin que fuente alguna pueda considerarse digna de crédito, es decir nadie tiene la razón nomás ellos los de Morena. En efecto, Morena en Sinaloa trata de frenar los incentivos económicos de inversión, trata de hacer quedar mal al gobierno, lo que reduce el empleo y la producción de satisfactores, actuando por consigna desde México, no por justicia, ni por voluntad propia, menos por amor al estado, lo cual para mí es traición a su Estado. Los elementos anteriores proveen razonablemente una definición de ingobernabilidad; Es decir, de un escenario político de lucha extrema por el poder, por medios no democráticos, y que realizan sin cuartel los líderes y sus grupos aliados, en la que la vida del ciudadano común está llena de intranquilidad y zozobra. Por ello, con una Morena en Sinaloa fracasada, fallando notablemente en su responsabilidad esencial, la de proveer a los ciudadanos de un ambiente de seguridad y orden legal que les haga posible tener una confianza razonable en el presente y el futuro tanto en el legislativo, como donde son gobiernos municipales, estamos perdidos socialmente con esta actitud irresponsable, luego entonces donde está el bienestar prometido por AMLO. En esa tesitura, tenemos que es contradictoria e incongruente la conducta política de Morena estatal, a la del Gobierno Federal que son del mismo partido; no cabe duda que son dos posturas y visiones políticas totalmente distintas una de otra, por un lado Morena en Sinaloa bajo el pretexto infundado de las cuentas públicas, critica la administración del gobierno del estado; en la federación es todo lo contrario, reconocen públicamente el trabajo, gestión y labor desarrollada a la fecha por el gobernador Quirino Ordaz Coppel, el propio Presidente de la República lo ha reconocido, en varias ocasiones, inclusive reitera que el gobierno del estado se maneja con altos estándares de transparencia y rendición de cuentas, que es un gobierno incluyente, de respeto, de trabajo serio y de alta eficiencia corporativa, prueba de ello la buena calificación de riesgo crediticio del estado y la excelente calificación del Gobernador, como uno de los mejores del país. Es decir, el Presidente AMLO reconoce la valía del Gobernador y su gente en el estado.

GOTA Y CHISPA:

El Gobierno del Estado tiene un gabinete de funcionarios de trabajo y perfil calificado, nunca ha sido el gobierno de Quirino Ordaz Coppel una agencia de colocación de personal, mucho menos una pista de aterrizaje para la llegada de políticos en descanso, eso ya pasó a la historia. Todo el gabinete mayor tiene funcionarios que tienen como perfil de servicio a la gente y como objetivo el orden, la seriedad, y donde prevalece la transparencia, la rendición de cuentas, la austeridad y sanear las finanzas públicas del Estado. El Gobernador y su equipo de funcionarios en todos los niveles, no buscan ser personas importantes sino útiles al gobierno y a la gente. “Nos vemos Mañana”…