La exclusión de las limpiezas étnicas sociales...
Por Benjamín Bojórquez Olea 18 Julio 2023
Sobre el camino
La historia no es un hecho aislado basado en un momento. No existe
texto sin contexto. Pueblo, pueblo, pueblo. Somos el pueblo. Nada sin el
pueblo. Todo con el pueblo. Así como es conveniente y menester terminar con los
que abusan de la buena voluntad del pueblo, hay que saber que ningún pueblo
puede vivir ni triunfar sobre sí mismo si existe una división y enfrentamiento
entre dos o más partes que lo conforman.
En el
pasado, Abraham Lincoln hizo una declaración sobre que su gobierno
era el "gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo",
frase e ideología que, no sé si exitosamente no ha parado de presumir el líder
mexicano. El pueblo como escudo, razón de ser y como único destino que enarbole
todos nuestros sacrificios, aciertos y errores. El discurso que ha manejado
desde antes de que portara la banda presidencial no es uno de integración, él
no cree en la integración. Él es un profeta radical que cree que su misión no
es otra más que la de encontrar a los buenos y exculpar y quitar a los
malos.
A
herrojados no de los muros de la verdadera religión y verdadero Dios, sino a
herrojados del futuro por la espada flamígera de quien todo lo hace y todo lo
ve. Lo que tenemos que hacer es construir una alternativa u oposición que tenga
sentido y sea capaz de llevarnos a abrir las puertas del futuro.
Y eso
empieza por "la exclusión de las limpiezas étnicas-sociales".
Ha resultado muy interesante observar el repentino cambio que hay en el
enrarecido y turbio movimiento de quienes aspiran a ser el o la elegida para
protagonizar la sucesión presidencial. Desde la irrupción de Xóchitl
Gálvez en el apacible jardín en el que contaminaban y sonreían
admirando las pintas callejeras con sus respectivos nombres, o quizá sonriendo
al contemplarse en los anuncios espectaculares, el panorama ha cambiado de tal
manera que nuestro inquilino de Palacio Nacional se ha convertido, una vez más
en el mejor coordinador de sus campañas.
A mi
criterio, mientras las llamadas "corcholatas" se
debaten en sus propios pantanos, vaya que tienen tareas complicadas para
generar una imagen que resulte atractiva y carismática. Los fuegos artificiales
de la retórica presidencial son apenas un atisbo de lo que se avecina en los
próximos meses, días en los que desde el púlpito de la arrogancia se seguirán
lanzando infundidos y se atizará la parrilla que ha sido muy bien capitalizada
por los protagonistas del actual sexenio. Para tirios y troyanos exacerbar la
polarización será uno de los mejores recursos. La ligereza con la que se
enciende el fuego siempre acaba muy mal cuando el combustible es el populismo
se les regala cajetillas de cerillos a sus voceros.
Con
facilidad y ligereza se van sembrando declaraciones y mentiras que se defienden
como verdades absolutas en un contexto electoral que, en el papel, aún no
inician. Menudo trabajo el que tenemos por delante intentar distinguir aquello
que es importante entre tanta podredumbre. Así, las ideas y las propuestas para
enfrentar la realidad de un país que se fractura cada día más son las grandes
ausentes en medio de discursos plagados de "continuismo",
revanchismo, clasismo e ignorancia
Mientras la
realidad se planta frente a nosotros, la dejamos de ver para darle mayor
importancia a quienes son piezas de un juego abalorios: darle reflectores y ser
el eco de la superficialidad de sus palabras no permite que la atención se
pueda enfocar en aquello que no ha sido resuelto durante este sexenio, ni en los
anteriores, y solo se contribuye a que la pobreza y la violencia, entre tantos
otros problemas, sean las monedas de cambio y anécdotas entre tanta miseria
retórica.
GOTITAS DE
AGUA:
Considero
que La vida electoral parece una caja de sorpresas, pero no lo es. Por razón
aristotélica o por sortilegio milagroso, cualquiera podría ganar la banda
presidencial. A unos los apoya el gobierno y sus partidarios. A otros los apoya
el anti gobierno y los opositores. Yo diría que están muy parejos. Todos tienen
posibilidades. La historia y el futuro están llenos de maravillas políticas. Un
breve ejercicio de memoria histórica no sería muy útil. "Si
cierran la puerta, apaguen la luz". "Nos vemos Mañana"...