Opinion

MORENA: 2021

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Por Benjamín Bojórquez Olea 07 Enero 2019

SOBRE El CAMINO

Esta nueva realidad política de choque que se vive en el poder legislativo en Sinaloa, de la llamada 4ta Transformación ha encontrado críticas superfluas, sin embargo, esta nueva visión que encabeza, Andrés Manuel López Obrador, es únicamente gestado desde las alturas, para que abajo comulguen con otra visión que desde antes de la campaña presidencial federal, muchos actores que jamás imaginaron arribar a distintos cargos políticos se vean acotados por una marca que poco a poco se vienen devaluando, debido a los intereses futuros de la inequívoca e ineficiente turbulencia interna de los mismos “curulistas” de Morena en Sinaloa. La división de este grupo parlamentario de Movimiento de Regeneración Nacional es más que evidente y no tiene retorno, ya que los distintos actores de la 4ta Transformación, ya no comulgan con su mismo círculo, ni existe comunión entre sus intereses. Sólo por citar un caso concreto. La diputada morenista, Graciela Domínguez Nava, actual líder de la Junta de Coordinación Política del congreso local (JUCOPO), trae diferencias de poder e intereses, con la actual Diputada Federal e introvertida, Merary Villegas Sánchez, desde luego, todo esto trae un mar de fondo, ocasionado por las elecciones venideras del 2021; y lejos del posible veto esta semana del presupuesto de egresos en el congreso del estado, trae lecturas álgidas donde los mismos morenistas se pegan un balazo en el pie, en perjuicio propio, dado su falta de liderazgo y astucia política para operar desde el legislativo local, un presupuesto consensado por todas las fuerzas políticas que conviven en el congreso. Considero que más allá de un sueño guajiro del llamado“referéndum” de que aparezca en las boletas en las elecciones intermedias López Obrador, la emoción con la que juegan los actores de Morena es un error, que les costará un debut y despedida sin retorno. Es muy claro el fondo del tema, al interior del grupo parlamentario de Morena en el Congreso, existe una guerra sin cuartel de unos diputados por posicionar rumbo a la gubernatura del 2021 al Senador Rubén Rocha Moya y otros al verdadero amigo de AMLO en Sinaloa, el actual Presidente Municipal del puerto Mazatleco, el Químico Benítez, lo cual, desde luego que dará un giro de 180 grados, con un costo político anticipado y previsible. Hoy, no sólo los morenistas de Sinaloa, también la sociedad civil y el sector privado deberían estarse replanteando estos dilemas del futuro, que está causando Morena al interior del legislativo, es decir, actos legislativos que provocan, desconfianza, ingobernabilidad, daños o perjuicios para el Estado y sus Municipios. Llama la atención, que Morena no sepa hacer bien las cosas en el Congreso, tirando por la borda el esfuerzo realizado por miles de sinaloenses en las elecciones pasadas, que confiaron en este partido de nueva creación, lo que hoy está escapándose de las manos. Todos éstos actos, acciones u omisiones cometidos por los diputados de Morena, están rebasando la paciencia de la gente que sigue y seguirá inconforme, porque las respuestas de la lógica institucional están fallando, principalmente por la falta de credibilidad, seriedad y legalidad de los actos legislativos de Morena, ocasionando una “olla de presión” que puede estallar. Porque, parafraseando al sociólogo francés Alain Touraine, el derrumbe de las instituciones y la debilidad sin estructura como las conocemos es reto de una sociedad que se reconstruye. Si queremos que esta realidad adversa cambie, Morena en Sinaloa tendría que poner un ojo auto crítico en el ejercicio de su actuación legislativa, donde ponga por delante el diálogo, el consenso, la legitimación, y el entendimiento con todas las fuerzas políticas del congreso y sobre todo con el Ejecutivo del Estado, atendiendo al principio jurídico constitucional del real equilibrio de poderes que debe privar en el Estado, si no entienden estas cuestiones de derecho y/o presupuestos de ley, esta semana que viene lloverá dentro y fuera del recinto, en perjuicio de la sociedad sinaloense. Señores legisladores de Morena, la manera de atacar la ilegalidad y querer sobrepasar jurídicamente los reglamentos, es sin duda un golpe institucional a la democracia, lo que siempre ustedes reclamaban de otros gobiernos, y si con esas medidas de ataque mediático y social buscan desmarcar la lucha entre ustedes por la máxima silla más representativa del Estado, el error de no tejer fino en pro del 2021 tendrá desviaciones que los harán ver muy mal ante la sociedad. Recuperar por ustedes la confianza social será elemento clave para rehacer el futuro político en Sinaloa, les recomiendo cambiar su retorica interna y externa. “Posdata: si van por las tortillas, hagan fila”.



GOTA Y CHISPA:


Por cierto un cambio que tiene lógica en el gabinete de la actual administración estatal, es la del actual secretario General de Gobierno, el abogado prestigiado y de reconocimiento a nivel nacional, Gonzalo Gómez Flores, su posible salida obedecería a un cambio de aires políticos en aras a la sucesión 2021. Por ello el pragmatismo y tejer fino será pieza importante y de confianza en la actual administración del ejecutivo estatal, lo cual, el ex - presidente Municipal de la perla del pacifico, Mazatlán, José Joel Boucieguez, pudiera ser esa pieza que se requiere para una mejor operación política que permita suavizar a los grupos de poder, y con ello oxigenar y modificar algunas conductas que no saben a dónde ir a bailar. “Atentos”. “Nos vemos Mañana”…