¿Prensa vendida?
Por Juan Manuel Partida 22 Mayo 2023
Altoparlante
Buen número de llamadas y mensajes recibí nuevamente
el día de ayer con dudas muy serias de si en Sinaloa tenemos una prensa
vendida.
Es común ver en las redes sociales comentarios ciudadanos
contra un periodismo que se acusa carece de valor frente a las corrupciones y
abusos de poder por parte de nuestros gobiernos.
Se nos reprocha que muchos medios de
comunicación callan ante hechos que de manera normal fueran la noticia
principal.
Los comentarios de ayer fueron de colegas
periodistas, y surgen tras conocer contratos millonarios entre el gobierno
estatal y el periódico Noroeste.
De entrada, hay que subrayar que no existe en
ello ninguna ilegalidad.
Los medios viven de la publicidad y de los convenios
de difusión informativa.
Hay sin embargo sobre estos contratos una serie
de dilemas que motivan la reflexión.
Partamos de que Noroeste se ha erigido de
manera permanente como un faro de moralidad.
Presumieron incluso hace más de veinte años un
código de ética en el que destacaban la honestidad, la no publicación de
gacetillas (notas pagadas que aparecen como información “normal”), y una línea
editorial que no se vende ante nadie.
Un periodismo independiente al servicio de la
sociedad, y no de los grupos de poder.
Pero, lástima Margarito, una cosa es la que se
dice y otra muy distinta la que se hace.
Una prueba irrefutable de esta doble moral nos
la dio Jesús Escalante, en una entrevista que en ese mismo medio le hicieron y
publicaron el 24 de junio de 1996, página 14 de la sección B.
Fue una confesión contundente de actos de
corrupción periodística.
Siendo director de este diario en Culiacán,
Jesús Escalante recibió un maletín lleno de dinero enviado por el gobierno de
Sinaloa como segunda parte del pago de un convenio por “servicios”
informativos.
Fue ésa una entrevista que Escalante exigió en
su salida a manera de deslinde personal, y dejó en ello evidencia clara contra
un medio que se presume honesto y ejemplar.
Con la puntualización de que el hecho quedó
señalado, con el borrón y cuenta nueva.
Se clavaron también ese maletín lleno de dinero
corrupto, que por lo menos era el segundo.
Pero, bueno, esto es cosa pasada.
La cito como derecho de réplica contra quienes
se la pasan tachando de inmorales a otros medios de comunicación y periodistas.
Hoy vemos que ese mismo medio de comunicación
cobró al gobierno de Sinaloa por lo menos 18 millones de pesos desde el año
pasado a la fecha por publicidad y difusiones informativas.
Tenemos en nuestras manos la relación de pagos
y copias de los convenios.
Reiteremos que nada ilegal existe en esto.
El dilema está en torno a las condiciones no
escritas.
Particularmente por la sospecha de que se
consiguió un medio servil a las órdenes del gobernador Rubén Rocha Moya.
Un periódico que se destaca de manera vigorosa
y hasta como parte activa en la persecución contra la UAS y contra Héctor
Melesio Cuén Ojeda.
Vemos algo similar con el columnista Alejandro
Sicairos Rivas, quien con su Revista Espejo publica “investigaciones” conjuntas
con Noroeste.
Sicairos también se proclama honestísimo, y está
señalado de que a cambio de beneficios económicos personales y familiares ha
vendido, otra vez, su pluma al mejor postor.
¿Es casualidad que periodistas de dos medios
diferentes hagan la misma “investigación”?
Dijeran los criminosos que Noroeste y Espejo
prefirieron repartirse las sospechas y las culpas.
Y el dinero, por supuesto.
Lo admitamos o no, la percepción social es
creciente contra los periodistas y medios de comunicación.
Buena parte del pueblo nos señala como prensa
vendida y sin compromiso con la verdad y con la justicia.
Quien esto escribe ha expresado por ello
reflexiones autocríticas, y subrayado la necesidad de que hagamos un mejor
esfuerzo para cumplir también con nuestra función de servir a la sociedad.
Para bien de nosotros mismos, de Sinaloa y de
México.
DIRIGENTE
ESTATAL PRIÍSTA POR CONSULTA A LA BASE
Una buena noticia para los priístas es que la
próxima dirigencia estatal de su partido se elegirá mediante consulta a la
base.
Decisión unánime del consejo político tricolor,
que se hará del conocimiento de la dirigencia nacional.
Los militantes decidirán con su voto, y quienes
contiendan deben respetar la voluntad que se exprese en la contienda interna.
Es éste un método mucho mejor que el dedazo,
que amenazaba desbandadas.