¿REELECCIÓN EN LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA de OCCIDENTE?
Por Jaime González 04 Septiembre 2019
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En últimas fechas he leído algunos artículos de opinión en diversos portales de internet, donde dan a conocer los nombres de los posibles aspirantes a suceder en la rectoría de la UNIVERSIDAD AUTÓNOMA de OCCIDENTE a la Dra. Sylvia Paz Díaz Camacho, estableciendo que esta, no puede aspirar, como lo establece la Ley Orgánica de esta casa de estudios a un segundo período rectoral.
En la argumentación de estos artículos, mencionan que tiene el impedimento señalado en al artículo 27 fracción quinta, ya que no ha cumplido con los tres años de ser miembro de la comunidad universitaria.
Lamento señalar, que desde el punto de vista técnico jurídico y a la luz de un análisis integral de las normas generales que rigen la vida universitaria, la reelección de la Dra. Díaz Camacho, si es posible.
En primer lugar, debo decir que, a la fecha, no conozco personalmente a la rectora de esta prestigiada casa de estudios. No formo parte del personal administrativo o docente de la misma y mi opinión la externo como una persona interesada en el desarrollo institucional de la UAdeO. Debo señalar que formé parte del extinto Centro de Estudios Superiores de Occidente, antecedente inmediato de esta universidad, bajo la dirección del siempre bien recordado Dr. Julio Ibarra Urrea.
En el período rectoral de la Dra. Díaz Camacho, se ha desarrollado como nunca antes, el incremento de matrícula, el desarrollo docente y la joya de la corona, se logró la tan ansiada autonomía universitaria.
En segundo lugar, la Dra. Díaz Camacho tiene una sólida formación científica, la cual ha sido reconocida, no solo en el estado de Sinaloa, sino también fuera de sus fronteras.
Me Parece que las instituciones universitarias, como es el caso de esta que comento, debe estar representada por alguien que sepa de que se trata la vida universitaria, que sepa donde y cuando recurrir en busca del desarrollo integral de la casa de estudios y finalmente, que sepa mantener el equilibrio entre los trabajadores docentes, administrativos y directivos, priorizando el interés superior del alumno y la academia.
Sin dejar de reconocer los méritos que puedan tener quienes han sido mencionados para suceder a la actual rectora, me parece que no es momento de experimentar, ya que la universidad, va por buen camino.
