UAS en pie de guerra
Por Juan Manuel Partida 04 Julio 2023
Altoparlante...
Veremos a la UAS ahora sí en pie de guerra contra la persecución política que encabeza gobernador Rubén Rocha Moya.
Así lo dijo el rector Jesús Madueña Molina, quien no se anduvo por las ramas y señaló al ejecutivo estatal como el responsable de los ataques y agresiones.
Acusa que la fiscalía les fabrica delitos con jueces a modo, con el mafioso Enrique Inzunza orquestando esas infamias, “pero lo que no saben es la respuesta que van a tener por parte de la Universidad Autónoma de Sinaloa”.
Que habrá una estrategia de defensa más agresiva, aseguró.
Esperemos que ahora sí se pongan las pilas, porque han sido muchas las ingenuidades.
Desde el principio advertimos en Altoparlante que Rubén Rocha y sus compinches no entienden razones y que la UAS necesita mostrar toda su fuerza para enfrentarlos.
Varias veces han anunciado que lucharán con todo, pero no han pasado de los atoles discursivos.
Si Madueña cree que le mete miedo al gobernador, desagua bien lejos del orificio.
Ya rectificamos que no se acobardó ni dobló, pero es muy claro que le ha faltado punch.
Y la falta de energía va junta con pegado de la cobardía.
SE DISCULPÓ RUBÉN ROCHA CON MELESIO
Aunque las disculpas se ofrecen en lugar de pedirse, Rubén Rocha pareció retractarse por llamar corrupto a Héctor Melesio Cuén Ojeda.
Quisiera uno pensar que está rectificando, pero parece más fácil meter un millón de gentes dentro de un vochito.
Las ilegalidades y los abusos de poder son marca de un gobernador que se quiere imponer a todos, en todo.
Escuché hace días a Rocha afirmar que saben muy bien lo que los sinaloenses piensan y opinan sobre la cuatroté estatal.
O lo engañan burdamente, o miente otra vez con descaro.
Cada vez son más los sinaloenses que lo repudian a él, a sus familiares y a toda su pandilla.
La percepción social creciente es que debe estar en el psiquiátrico y no al frente del gobierno de Sinaloa.
UN PRI SIN REMEDIO QUE NO QUIERE ENTENDER
El PRI no tiene remedio, porque muchos de sus militantes prefieren ser cómplices y simuladores.
En lugar de exigir que se corrija lo mal hecho, solapan a sus dirigentes autoritarios que se burlan de la militancia y del pueblo.
Volvimos a ver ayer esta actitud miserable, con la descalificación contra los priístas que anunciaron su renuncia.
Son puro corrupto y malagradecido, leí repetidamente.
Hago otra vez la pregunta de hace unos días: ¿porqué no los corrieron antes de que se fueran?
La respuesta vuelve a ser la misma.
Son corruptos, porque se fueron del PRI.
Si continuaran en el partido, nadie señalara sus corrupciones.
Como sucede con algunos que siguen ahí, por ejemplo el dirigente Alito Moreno.