Todos los políticos mienten, cierto. Sin embargo. El Presidente López Obrador se está excediendo y eso es peligroso porque ningún gobernante puede hacer de la mentira un hábito en toda la población. Como candidato presidencial y ahora como Presidente de la Republica ha repetido como un mantra sagrado la trilogía virtuosa de no mentir, no robar y no traicionar. Empero, En el terreno de los hechos, desafortunadamente, hemos comprobado todo lo contrario.
El Presidente Lopez Obrador, está tan lleno de contradicciones que no se sabe cuándo está diciendo la verdad, cuando una mentira, o si está viviendo una palaciega fantasía.
Ante las cúpulas empresariales congregadas en Palacio Nacional para la firma del Acuerdo Nacional para la Infraestructura, el Presidente López Obrador consideró que con esta acción se echa andar "un motor muy importante para la economía". Tras destacar que las políticas sociales de su gobierno están orientadas a consolidar la economía popular y detonar el consumo interno, aseguro que existe un escenario en el cual se puede decir "que la economía ahí va".
Citando al extitular de SHCP, Carlos Urzúa: “Oficialmente, estamos al borde del precipicio”.
Arturo Herrera, reconoció que “la economía nacional crece a niveles más bajos de los esperados”. El diputado morenista Mario Delgado por fin admitió que “Mexico camina hacia la recesión”. Ni hablar. Cuando no se crece al nivel esperado, como hoy sucede, no hay recursos suficientes para salud, campo, vivienda, educación. Imagínese lo que pasaría si no alcanza o se acaba el dinero para los programas asistenciales y clientelares del Presidente Lopez Obrador.
Hoy, los mexicanos ven con pesimismo la situación económica del país.
De acuerdo con los datos publicados por el Inegi: El 45 % de los mexicanos considera que la economía nacional está peor que hace un año y solo el 16 % piensa que está mejor. Aunque en menor grado, el 27 % dice que su situación económica está peor que hace un año, el 20 % cree que esta mejor y el 54 % dice que su situación no ha cambiado. En base a lo anterior la población es pesimista en cuanto a las posibilidades para comprar ropa, calzado y electrodomésticos.
Lopez Obrador podrá decir misa, pero al pueblo bueno y sabio no le alcanza para gasolina.
Jonathan Ruiz, periodista del diario El Financiero, escribió hace unos días que el gobierno de la 4T, de enero a septiembre, cobró al consumidor aproximadamente 4.98 pesos solamente por IEPS de cada litro de gasolina o diésel. Y en el mismo periodo de 2018, el gobierno anterior, cobro un monto cercano a los 2.74 pesos por litro. Clara como el agua está la mentira: el gobierno del Presidente Lopez Obrador, no revirtió el “gasolinazo”, sino que prácticamente lo duplicó.
Cuando la gente se dé cuenta de que la verdad es mentira, se puede desatar la ira.