El coronavirus no sólo ha contagiado biológicamente a cerca de 32 mil personas, ahora también ha puesto en “cuarentena” a la economía china y al comercio mundial.
El pánico sanitario y económico se ha apoderado de varios países y segmentos de la población, a pesar de que esta enfermedad se mantiene como una epidemia, es decir, sólo se ha propagado rápidamente en una región de China.
De acuerdo con los últimos datos dados a conocer este fin de semana por la Organización Mundial de la Salud (OMS), de los 31 mil 481 casos confirmados, el 99.1% se han registrado dentro de China. Además, de las 637 muertes contabilizadas, apenas una se ha dado fuera de ese país.
Por este motivo, aunque la OMS declaró alerta internacional por el coronavirus, todavía no la ha clasificado como una pandemia, es decir, como una enfermedad de rápida propagación en varios países.
No obstante, desde su descubrimiento, las medidas que ha tomado el Gobierno chino para contener el coronavirus, comienzan a sentirse en la economía de ese país y a nivel internacional.
China es la segunda economía del mundo, detrás de los Estados Unidos, al abarcar el 16.3% del Producto Interno Bruto (PIB) del planeta, según datos del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Por eso, citando a un clásico mexicano, cuando China estornuda, al resto del mundo le da un resfriado.
Desde el surgimiento del coronavirus, el Gobierno chino aumentó los días de asueto con motivo del año nuevo lunar, para evitar que la movilización de trabajadores y viajeros propagara más el brote.
Adicionalmente el Banco Central de ese país inyectó 173 mil millones de dólares al sistema financiero para evitar pánico entre los inversionistas. Ha sido su mayor intervención desde 2004.
La calificadora de riesgos Standard and Poor’s estima que en China podría darse una caída del 10% en el consumo, lo que reduciría su crecimiento en 1.2 puntos porcentuales este 2020.
La economía china ya vio afectado su crecimiento en 2019 por la guerra comercial con Estados Unidos, por lo que sumaría dos años con dificultades.
En el caso de México podría haber dos efectos económicos a causa del coronavirus, uno negativo y otro positivo.
Por una parte, los precios del petróleo se han desplomado 15% en lo que va del 2020. En la última semana, China ha reducido un 20% sus importaciones de crudo, lo que equivale a las necesidades de petróleo de Italia y Reino Unido juntos, esto de acuerdo con la agencia Bloomberg.
De prolongarse esto, pondrá en aprietos las finanzas de Pemex y el Gobierno federal, para quien la venta de crudo aún representa un 18% de sus ingresos.
No obstante, la reducción del crecimiento en China y el cierre temporal de centros de trabajo, abrirá oportunidades para que algunas empresas mexicanas incrementen su participación en el mercado estadounidense.
Esto ya sucedió el año pasado con la guerra comercial que libraron ambos gigantes económicos. Según la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (Unctad), México captó 3 mil 500 millones de dólares de importaciones que Estados Unidos dejó de comprar a China.
Los sectores más beneficiados fueron los enfocados a la fabricación de: maquinaria eléctrica, productos agroalimentarios, equipo de autotransporte, maquinaria de oficina, metales y minerales e instrumentos de precisión.
Por otra parte, según la Asociación Mexicana de Engordadores de Ganado (AMEG) las preocupaciones sanitarias desatadas por el coronavirus en China, podrían elevar en un 40% las exportaciones mexicanas de carne a ese país.
El mercado chino es el principal importador de carne del mundo. Esto representaría sin duda una interesante ventana de oportunidad para productores sonorenses de carne.
Sin duda las crisis generan peligros, pero también oportunidades.